Independiente pasó sin sobresaltos a los octavos de final de la Copa Argentina tras superar a Belgrano en el estadio de Banfield, muy cerca de Avellaneda, desde donde sus hinchas fueron en masa a vivarlo. Los dos goles del juvenil Francisco Pizzini significaron la victoria en el primer partido oficial en el que el conjunto rojo es dirigido por Jorge Almirón, que viene de conducir a Defensa y Justicia en la B Nacional (2012-2013) y a Godoy Cruz de Mendoza en Primera durante la temporada pasada. El próximo rival de Independiente en el certamen será Estudiantes de La Plata.

Belgrano tomó la iniciativa, pero Independiente emparejó el trámite gracias al despliegue de Pizzini, la gran figura del ganador, que por la banda izquierda desequilibró permanentemente a Turus. Fue por ese sector que desbordó para sacar un zurdazo, desviado por Olave al tiro de esquina, y luego metió otro disparo que el arquero cordobés mandó con una mano al corner.

Lo que parecía transformarse en el duelo de la noche se resolvió rápidamente, porque del tiro de esquina Pizzini tomó la pelota de sobrepique y su bombazo cruzado hizo inútil la estirada del golero cordobés, entrando junto al palo derecho, un rato antes de la primera media hora de juego.

En el inicio del segundo tiempo, Belgrano tuvo a mano la igualdad con un centro del ingresado Rigoni para el cabezazo de Pereyra, de frente al arco, que salió desviado.

De esa jugada, Independiente armó un contraataque, comandado por Pisano en la derecha, quien al llegar al área grande enganchó y cedió en el otro sector a Pizzini. El chico definió con un tiro que se elevó tras un roce en un rival y se le metió a Olave por arriba de la cabeza. Apenas había comenzado el complemento y el partido aparecía definido.

Belgrano no contó con la suerte necesaria para descontar, ya que contó con varias chances para lograrlo con centros que lastimaron al fondo del conjunto de Avellaneda, que trató de controlar el balón para dejar correr los minutos.