Alejandro Burzaco, ex CEO de la empresa Torneos, se declaró inocente en el caso de corrupción que afecta a la FIFA, tras habérsele notificado los cargos en su contra: conspiración, lavado de dinero y corrupción. El juez fijó la libertad mediante una fianza de 20 millones de dólares que el acusado aceptó hacerse cargo. El empresario, uno de los 14 funcionarios de la FIFA acusados por las autoridades estadounidenses, permanecerá con arresto domiciliario y un brazalete electrónico para ser controlado. Burzaco, quien se entregó en junio a la policía en Italia, compareció ante un tribunal de Nueva York vistiendo un traje oscuro, corbata clara y camisa blanca. Está acusado, entre otros delitos, de haber pagado 110 millones de dólares en coimas a una entidad conocida bajo el nombre de Datisa, para que la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf), así como la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) le otorgaran los derechos de televisación de tres Copas América (2015, 2019 y 2023) y la Copa del Centenario de 2016, según el acta de acusación divulgada en mayo por las autoridades estadounidenses. Al menos 40 millones ya fueron pagados, según la misma fuente.

Es el segundo de los 14 dirigentes internacionales de la FIFA inculpados por la Justicia estadounidense en comparecer, en Brooklyn, tras lo realizado por Jeffrey Webb, ex vicepresidente de la FIFA y ex presidente de la Concacaf, quien el 18 de julio negó su culpabilidad en Nueva York. Webb, quien según la fiscalía fue uno de los que recibió parte de esos 110 millones, fue liberado a cambio de una fianza de 10 millones de dólares.

Las autoridades estadounidenses inculparon el pasado 27 de mayo a 14 personas, nueve responsables de la FIFA y cinco socios, de haber solicitado y recibido más de 150 millones de dólares en sobornos y comisiones en un período de 25 años. El gran operativo que se realizó en Suiza, fue a dos días del acto eleccionario en esa entidad, que volvió a elegir a Joseph Blatter.