A pesar de no haber jugado en un nivel destacado, al equipo le alcanzó para derrotar anoche a Chile, en Santiago, y acercarse al grupo de líderes de la clasificación. La próxima presentación del plantel será el martes próximo ante Bolivia, en Córdoba.

La Selección se vio sorprendida por la postura de los chilenos, que comenzaron el juego tomando la iniciativa e impidiendo que los más capacitados del equipo visitante pudieran controlar la pelota. Entre Matías Fernández y Orellana se las ingeniaban para encabezar los circuitos y abastecer a Sánchez en los últimos metros.

El primer contratiempo para Chile se dio rápido, debido a que Fernández tuvo que salir lesionado a los seis minutos. Su reemplazante, Silva, fue el que tuvo la primera aproximación de riesgo. El volante probó de media distancia y la pelota salió cerca del palo. Argentina respondió con una gran acción individual de Messi, quien arrancó por la derecha dejando tres hombres en el camino, cedió la pelota a Di María, y el ex Central remató por arriba.

El peor momento del seleccionado argentino se produjo cuando ya estaba en desventaja, por el gol convertido de cabeza por Felipe Gutiérrez, que le ganó en el salto a Biglia y conectó un tiro de esquina. Argentina sintió el impacto y no podía coordinar el trabajo en todas sus líneas, sobre todo cuando tenía que retroceder a ocupar los espacios en defensa.

El juego estaba llegando a los 20 minutos, y el equipo de Gerardo Martino comenzó a adelantarse en el terreno. De esa manera pudo encontrarse con el empate. Banega se llevó la pelota en diagonal hacia la izquierda, la pudo proteger ante dos defensores, y antes de que la pierda, Di María aprovechó para pegarle con la derecha y ubicarla al lado del palo más lejano de Bravo. El arquero se estiró pero no pudo evitar el gol.

La ráfaga de Argentina siguió en esos instantes, y cinco minutos más tarde dio vuelta el marcador a través de Mercado. El jugador de River fue a buscar al área rival, insistió y sacó ventaja de un toque defectuoso de Isla, quien estaba tratando de contener a Messi. El lateral empujó la pelota con un toque suave casi abajo del arco. En ese momento, Chile había sufrido la segunda baja por la lesión de Marcelo Díaz.

Por esos cambios, la estructura local no era la misma, y el que pasó a dominar el desarrollo fue Argentina. En el final de la primera etapa, Agüero pudo haber aumentado la diferencia, pero su cabezazo se fue desviado. La gran chance de Chile apareció en el descuento, y el derechazo de Gutiérrez se fue apenas arriba.

Chile salió a jugar con un poco más de decisión el segundo tiempo. Sin exhibir un fútbol vistoso, fue con más empuje hacia al área de Romero. Orellana probó desde afuera del área y Romero respondió bien, en lo que fue la jugada donde más tuvo que exigirse.

El conjunto nacional se preparó para jugar de contraataque, y en una de esas chances, Agüero llegó por la izquierda, enganchó, remató cruzado y la pelota se fue muy cerca. El jugador del City le dejó su lugar a Higuaín, y el ex River también tuvo una oportunidad pero su derechazo fue desviado justo por un defensor.

El desorden se fue adueñando del juego, y las emociones aparecían más por los errores que por los méritos. En ese panorama, Argentina hizo su negocio.

Estadio: Nacional (Santiago).

Arbitro: Heber Lopes (Brasil).

Goles: 10m F. Gutiérrez (C); 19m Di María (A); 24m Mercado (A).

Cambios: 6m Silva por M. Fernández (C), 20m Rabello por M. Díaz (C), 66m Higuaín por Agüero (A), 68m Pinilla por Rabello (C), 72m A. Fernández por Banega (A), 80m Lavezzi por Di María (A).