Cuando falta apenas un día para el debut del seleccionado olímpico en Río de Janeiro, ante Portugal, el entrenador del equipo argentino, Julio Olarticoechea, mostró confianza en sus jugadores para hacer la diferencia “con velocidad y fútbol”. “Lo que pretendemos es el equilibrio, pero sabiendo que en cualquier momento estamos para hacer daño. Voy a tratar de buscar eso, ser equilibrado, pero cuento con jugadores que pueden hacer la diferencia con velocidad y fútbol”, adelantó el director técnico.

Consultado sobre si ve a Portugal, el primer rival, como el más difícil del grupo, analizó que “generalmente el más complicado es el primero, por la presión, la ansiedad, que no te deja desarrollar el juego normal”. “En este caso también por el rival –prosiguió– porque viéndolo, Portugal es el que más potencial tiene. Argelia y Honduras tampoco van a ser fáciles pero tenemos confianza. Sería importantísimo arrancar bien.”

En una nota con el canal TyC Sports, Olarticoechea comentó que “después de los partidos amistosos uno saca conclusiones. No tuvimos mucho tiempo pero sirvió para ir conociéndonos”. “Sabemos lo que está pasando en el fútbol, pero es lo que hay –añadió–, estamos muy metidos. A veces no podés creer lo que pasa, pero en nuestro caso los jugadores se han mentalizado.”

El conductor comparó su actual gestión con la experiencia que le tocó vivir como jugador en el Mundial de 1986 y evaluó que “hay muchas coincidencias, desprolijidades, cómo se armó el grupo”. “Ojalá pueda llegar a contarlo desde el día de la final –continuó–, en las malas muchas veces te juntás y eso es lo que veo en este grupo.”

Olarticoechea consideró asimismo que los Juegos Olímpicos constituyen “una experiencia increíble, esto es mucho más grande, te encontrás con las figuras del mundo”. “Eso no tiene precio, sobre todo para los chicos que comen al lado de grandes figuras –agregó–. Te toque medalla o no, la experiencia te queda para el resto de tu vida.”

Y relató que “cuando se lo vio entrar a Rafael Nadal, se imaginan lo que fue. Ahora esperamos a (Emanuel) Ginóbili, a (Luis) Scola, monstruos de verdad. Seguramente hasta yo voy a ir a sacarme una foto”.

Al señalársele que muchos ven a Brasil como ganador de la medalla de oro, Olarticoechea evaluó que ganarle una eventual final “sería hermoso. Vamos a soñar, a veces los sueños se cumplen”.

El ex jugador de Boca, haciendo gala de la simpatía que lo caracteriza, se declaró como “un hombre con los pies en la tierra”’ y “encantando” por vivir la experiencia olímpica. “De lunes a jueves estaba con los chicos de la Selección Sub-20 y los viernes me iba a mi pueblo, Saladillo, y mi señora siempre me espera con mucho cariño pero para que reparta tortas con mi hija, porque ella es repostera, y ahora estoy acá en los Juegos Olímpicos. Miren cómo cambió mi vida’’, destacó el entrenador.