DEPORTES › GUILLERMO CORIA ES SEMIFINALISTA EN ROLAND GARROS
La Gran Willy se acerca a la final
El santafesino derrotó en gran forma a Carlos Moyá y mañana jugará ante Tim Henman, que eliminó a Chela. Hoy, Nalbandian y Gaudio.
Por Sebastián Fest
Desde París
Guillermo Coria ratificó ayer que es el gran candidato a alzar el domingo el trofeo de campeón de Roland Garros tras derrotar al español Carlos Moyá en un accidentado e intenso choque. “Di un paso muy importante, mi meta es ganar el torneo y alzar el domingo el trofeo”, dijo Coria tras batir 7-5, 7-6 (7-3), 6-3 a Moyá, que tuvo muy buenas oportunidades de escribir otra historia, pero que sucumbió ante la solidez granítica del argentino.
A diferencia de Moyá, Coria casi no mostró flaquezas anímicas y llega a la antesala de la final sin haber perdido un set. La derrota de Moyá implicó además que, por primera vez desde 1999, las semifinales se disputarán sin españoles.
Coria se jugará mañana el pase a la final ante el sorprendente inglés Tim Henman, vencedor de Juan Chela 6-2, 6-4, 6-4. Otros dos argentinos buscarán las semifinales: Gastón Gaudio enfrentará al australiano Lleyton Hewitt (televisan ESPN y América a las 7) y David Nalbandian al brasileño Gustavo Kuerten, renacido tricampeón del torneo.
Fue un día de emociones en París, y también de lluvia. Coria y Moyá interrumpieron dos veces en menos de media hora su choque en el primer set, algo que curiosamente no se dio a 500 metros de distancia, en la cancha central, que fue la tumba de la estadounidense Serena Williams y de la francesa Amelie Mauresmo.
Moyá perdió ante un Coria convertido en un muro, pero también por sus propias indecisiones, ya que dispuso de ventajas de 5-4 y su servicio en los dos primeros sets. Una estadística alcanza para describir la progresiva desesperación en la que fue entrando el español: cometió 56 errores no forzados contra sólo 26 de Coria.
Un “¡vamoooooo!” estruendoso resonó en el court “Suzanne Lenglen” cuando Coria vio cómo el revés de Moyá se iba lejos de los límites de la cancha. Se jugaban 50 minutos de partido, pero Coria acababa de ganar mucho más que el primer set: demasiadas oportunidades desperdiciadas por Moyá, que tras pasar de 2-4 a 5-4 y su servicio entregó el set 7-5.
Observado por Guillermo Vilas –el único argentino ganador de Roland Garros y dueño de cuatro torneos de Grand Slam–, Coria ratificó que está en la senda marcada por la figura más importante en la historia del tenis argentino.
Exceptuando cinco minutos tras la segunda interrupción por lluvia, Coria nunca flaqueó y terminó enloqueciendo a Moyá, que perdió su cuarto partido consecutivo en seis enfrentamientos con el argentino.
“El ha jugado muy bien, pero yo he tenido mi chance”, reconoció el español. “He estado jugando bien, pero el servicio me falló en el momento que más lo necesitaba”, se lamentó.
Coria coincidió. “Carlos sacó para el set en el primero y en el segundo. Pude aprovechar la oportunidad, y estoy muy contento. Respeto a Moyá mucho por el gran jugador que es. Ahora quiero disfrutar un poquito y preparar la semifinal”, anticipó.
“El año pasado me quedé con las ganas, estuve cerca de cumplir mi gran sueño y no se dio...”, recordó Coria, que hace un año cayó en semifinales ante el holandés Martin Verkerk. “Ahora no me conformo con ganar la semi, quiero ganar el torneo”, enfatizó. “Henman es un jugador muy completo y no me sorprende que esté en semifinales. Los dos nos conocemos bien, nos enfrentamos dos veces el año pasado.”
El argentino confirmó que es insaciable: “La clave de todo es entrenar duro día a día. Nunca bajé la cabeza y seguí luchando. Hoy vivo uno de los momentos más felices de mi vida, pero hay que seguir luchando, nunca me conformo con nada”.
Y dejó además una explicación del éxito de los tenistas de su país: “El hambre de gloria. Todos los argentinos somos de luchar hasta el final, no nos gusta perder a nada, y eso pasa en muchos otros deportes como el fútbol o el básquetbol. Nuestra situación económica no es buena. No nos regalaron nada, por eso luchamos tanto”.