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Faltó un punto. Sólo uno. El viaje a Rusia para disputar una semifinal del Grupo Mundial después de doce años estaba a una pelota. Sin embargo, una devolución corta de Lucas Arnold le permitió a los croatas zafar de la eliminación. Un rato más tarde, los que festejaron el triunfo fueron los visitantes, ya que Goran Ivanisevic e Ivan Ljubicic superaron 4–6, 2–6, 6–3, 6–0, 8–6 a Guillermo Cañas y Lucas Arnold, acortaron distancia en la serie y postergaron la definición para hoy. A partir de las 12 (televisa TyC Sports), la gran chance será para Juan Ignacio Chela, que se medirá con Ivan Ljubicic. Si el singlista número uno del país no consigue el decisivo punto, la última oportunidad la tendrá Gastón Gaudio, que en el segundo turno se enfrentará con Ivo Karlovic, aunque también existe la chance de que si la serie está igualada su rival sea Ivanisevic (ver recuadro).
Arnold y Chela estuvieron a un paso de la victoria. Aprovechando los errores de Ivanisevic y la timidez de Ljubicic, la pareja argentina sacó rápidas ventajas en los primeros dos sets, pese a que Cañas no estaba en su mejor nivel. Parecía que el partido estaba definido. Arnold se mostraba muy enchufado en el juego y festejaba cada punto como si se tratara del último, siempre de cara a la tribuna. Cañas se contagiaba de su compañero y comenzaba a ganar confianza. La gente celebraba el cómodo triunfo y hasta tenía tiempo de abuchear a Eduardo Moliné O’Connor (ver recuadro). Nada hacía suponer lo que vendría más tarde.
De a poco, Ivanisevic comenzó a exhibir parte de su repertorio. Voleas ganadoras y un carisma que le permitió neutralizar a la gente, también sirvieron para que Ljubicic se metiera en el juego y explotara su gran saque. Además, como Arnold no logró mantener el excelente nivel de los dos primeros parciales y Cañas alternaba buenos golpes con errores impropios de su jerarquía, los croatas pasaron a dominar las acciones. Por eso se llevaron el tercer set y sacaron rápidas ventajas en el cuarto, hasta el parate por la lluvia.
Con una mejor impresión por parte de los europeos arrancó el set definitorio. Con el aliento de la gente a pleno, los argentinos se las ingeniaron para mantener sus saques, a pesar de varios sofocones. Así llegaron al 5–4, cuando se produjo la chance más clara con el match point que Cañas y Arnold no pudieron resolver. A esa altura, la dupla croata lucía más compacta, mientras que los locales se sostenían por la garra de Arnold. Para colmo, con su experiencia, Ivanisevic absorbió toda la presión y mostró su mejor imagen en el final.
Los chicos argentinos estuvieron muy cerca, pero no se dio. Por eso los lamentos tras el partido fueron entendibles. “Jugamos un gran partido, pero tuvimos mala suerte y por eso perdimos. Estuvimos a un punto de ganar y creo que merecíamos quedarnos con el triunfo”, comentó Cañas. Para Arnold, el desconsuelo pasaba por la pena de los hinchas. “Estoy triste porque perdimos. Sé que aunque hicimos todo lo posible, no pudimos darle una alegría a la gente para retribuirles todo el apoyo que nos dio y que les agradeceré eternamente”, señaló el doblista argentino.
Claro que, más allá de la derrota, el capitán Alejandro Gattiker se quedó muy conforme con la entrega de los jugadores. “Los chicos estuvieron a un punto de ganar el partido, jugaron muy bien y pudieron haberse quedado con el triunfo. No hay nada para reprochar, tanto Cañas como Arnold hicieron lo imposible por ganar”, analizó Gattiker.