[cerrar]

Comparta esta nota con un amigo

E-Mail de su amigo
Su nombre
Su E-Mail

El gran movimiento de altas y bajas que generó la apertura del libro de pases que cerró ayer –aunque todavía queden unos días para aquellos clubes que quieran inscribir jugadores libres– permite imaginar un Apertura renovado y jerarquizado tanto por los futbolistas que vuelven de Europa como por los más de 40 extranjeros que se sumaron a los distintos equipos de Primera, varios de los cuales tienen nivel de selección.
River sorprendió adquiriendo el pase del talentoso colombiano Jairo Patiño, volante fino y de excelente pegada que jugó la última temporada en Newell’s, adonde llegó a préstamo cedido por el Deportivo Cali, que ahora lo vendió por 1,2 millones de dólares. Patiño no será el único extranjero en el equipo de Núñez, que ya cuenta con el chileno Marcelo Salas y los paraguayos Celso Ayala y Nelson Cuevas. Mientras que Boca, que se reforzó con Martín Palermo y Andrés Guglielminprieto, entre otros, también consiguió el pase del paraguayo Claudio Morel Rodríguez y conserva al colombiano Fabián Vargas.
Otro de los clubes que contarán con varios foráneos en el plantel es Colón, que tendrá al defensor chileno Marco González y a los colombianos Gerardo Bedoya, Giovanny Hernández y Freddy Grisales. A los santafesinos les siguen los rosarinos de Newell’s, que sumó al brasileño Mario Jardel (ex Sporting de Lisboa y Galatasaray), al arquero paraguayo Justo Villar, al delantero colombiano Martín Botero y al defensor Pablo Melo.
Para los jugadores extranjeros el fútbol argentino es una vidriera que les permite la posibilidad de mostrarse al fútbol europeo. La presencia de los chilenos Milovan Mirosevic (Racing), Rodrigo Meléndez (Estudiantes) y Pablo Galdames (Quilmes), los uruguayos Sergio Orteman (Independiente), Víctor Piriz Alves (Argentinos), Juan Manuel Olivera (San Lorenzo) y Sebastián García (Olimpo), entre otros, confirma una tendencia que en el fútbol local parece acrecentarse en los últimos años.
La posibilidad de utilizar el fútbol argentino como trampolín a la fama tiene su asidero. El pase del uruguayo Diego Forlán de Independiente al Manchester United; el del delantero colombiano Juan Pablo Angel de River a Aston Villa; el de los defensores Mario Yepes, ex River, ahora París Saint Germain, y Luis Amaranto Perea, que pasó de Boca al Atlético Madrid, confirman que las chances de éxito existen, pero también son contadas.