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Sin todos los titulares, con Salas a bordo, River dio vuelta el partido en Montevideo contra Nacional y sumó su quinta victoria en cinco partidos en la Copa Libertadores 2005, siendo el equipo de mejor rendimiento en el torneo. Ya clasificado de antemano para los octavos de final, lidera el Grupo 5, con 15 puntos, contra 6 del Olmedo y el Junior y 3 de Nacional.
Le costó adueñarse de la pelota en el inicio del partido, y el local era el que tenía la iniciativa del juego. Precisamente, la primera acción de peligro fue para el equipo uruguayo: el volante Ligüera remató al arco desde afuera del área y la pelota se fue apenas alta. Pero, en la siguiente oportunidad, Nacional se puso en ventaja. Apenas habían pasado cuatro minutos cuando Gustavo Méndez convirtió con un derechazo que sorprendió al arquero Lux, después de que Ligüera lo habilitara en la salida de un tiro libre.
A partir de esa diferencia, Nacional se retrasó un poco en el campo y River comenzó a arriesgar más en ataque. De esa manera tuvo varias chances para llegar a la igualdad. Ahumada no pudo vencer al arquero con un remate bajo, dentro del área, luego de que Viera rechazara con el pie. Pocos minutos después, Sand desperdició su posibilidad al desviar su disparo, y luego Salas no tuvo precisión con un cabezazo en el área chica.
El empate llegó a través de Ahumada: el correntino Sand desbordó por derecha, lanzó un centro atrás y el juvenil tocó suave la pelota al primer palo de Viera. Dos minutos después, Salas remató afuera ante el arquero. El final del primer tiempo dejó a ambos equipos con un jugador menos, ya que Méndez y Ameli se fueron expulsados por agredirse.
El que estaba necesitado de los puntos era Nacional, pero el que manejaba los tiempos y la pelota en el complemento era el conjunto visitante, que iba a encontrar el desnivel antes del cuarto de hora: un bombazo de fuera del área de Patiño rebotó en Viera y Sand, entrando por la izquierda, la paró con la derecha y con la zurda la cambió al segundo palo. Jesús Méndez cerró el resultado desde afuera del área, un centro que se coló sobre la cabeza del arquero.