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Corea del Sur se distanció de la prohibición impuesta por Japón y decidió aceptar una eventual visita de Diego Armando Maradona, en caso de que quiera presenciar partidos por jugarse en ese país por la Copa del Mundo que comenzará este fin de semana.
“A pesar de su pasado ligado a las drogas hemos decidido aceptar su visita”, afirmó el portavoz del Ministerio de Justicia de Corea del Sur, Sun Yung-Hoon, al referirse al ex astro del fútbol.
El vocero ministerial dijo que Corea “tiene reglas más flexibles que Japón” y recalcó que “para nosotros estas superestrellas no representan un peligro para el país”.
Corea del Sur, que comparte pero también compite por el Mundial con Japón, se diferenció así de su vecino, que prohibió días atrás el ingreso de Maradona por sus causas judiciales vinculadas con el consumo de drogas. “No sabemos si vendrá, pero no tendrá problemas en Corea del Sur”, avisó Sun Yung-Hoon.
Maradona, quien podría haber sido comentarista televisivo durante el Mundial para la cadena mexicana Televisa, que le ofreció unos 160 mil dólares por el trabajo, manifestó su malestar con el gobierno japonés la semana pasada, e incluso su apoderado Guillermo Coppola había ido más allá al decir que “a Diego no lo dejan entrar pero sí ingresan los que arrojaron bombas en Hiroshima”.
De todos modos, Maradona, que hace unos años colaboró con Corea del Sur cuando ésta competía para ganarle la sede del Mundial a Japón (antes de que se decidiera que compartieran su organización), dijo hace unos días que no iría a Seúl y que, antes que ello, prefería seguir el Mundial desde la TV. A Maradona le interesaba asistir al Mundial en Japón, donde inicialmente debe jugar el seleccionado argentino.