DEPORTES › A LOS TECNICOS DE FUTBOL LOS TRATAN DISTINTO
En Europa no los despiden
El ritmo de recambio de entrenadores en el fútbol argentino es muy superior al del nivel europeo, como lo prueban algunos ejemplos recientes. En 16 fechas, 10 técnicos dejaron su cargo.
Alain Perrin es un entrenador francés, que hasta el miércoles comandaba al Portsmouth de la Premier League inglesa. Luego de apenas dos triunfos en trece jornadas, Perrin fue destituido y se convirtió en el primer técnico despedido en lo que va de la temporada de la liga inglesa, de la que se llevan jugadas 13 fechas. Desde Madrid, David Beckham se quejó de los rumores sobre la posibilidad de que Wanderley Luxemburgo deje de ser el técnico de Real Madrid al afirmar que “en España se cambian mucho a los entrenadores”. Seguramente, ni Perrin ni Beckham están al tanto de la cantidad de cambios de técnicos que han sufrido los clubes argentinos desde que arrancó el Apertura.
“En Manchester tuve un entrenador en quince años y en Madrid, en tres años, llevo cinco. Eso es un problema. En España se cambia muy pronto”, se quejó Beckham ante las versiones crecientes de una pronta salida de Luxemburgo. Y puso como ejemplo al fútbol inglés, donde esta semana cayó el primer técnico de la temporada: Alain Perrin, que había llegado al Portsmouth en abril como interino, pero que prolongó su vínculo tras haber salvado al equipo del descenso. Ahora lo reemplazará su ayudante Joe Jordan.
Claro que esos antecedentes en comparación con la realidad del fútbol argentino generan risa. Desde que comenzó el Apertura, hace 16 fechas, diez entrenadores dejaron su cargo. Incluso, clubes como Tiro Federal e Instituto modificaron dos veces su conducción. En los últimos años, el promedio marcaba que los equipos de primera reemplazaban a sus técnicos cada dos fechas. En este certamen los tiempos se aceleraron y esa media será superada aun cuando no se produzca ningún despido antes del cierre del campeonato.
En cuanto a las razones de las salidas de cada uno de los entrenadores, en un único caso tuvo que ver con una elección propia ante una mejor oferta. Es que ante la renuncia casi obligada de Guillermo Rivarola a Racing, Fernando Quiroz resolvió irse de Instituto por su voluntad para aceptar el ofrecimiento que le hizo Blanquiceleste SA. En el resto de los casos, los malos resultados o el desgaste de la relación terminó con las diferentes salidas.
El primero en abandonar su cargo fue Leonardo Astrada, que tras la goleada que le propinó Banfield dejó River en la cuarta jornada para ser reemplazado por Reinaldo Merlo. Con argumentos similares luego fue Gerardo Martino el que renunció a Colón, que eligió a Edgardo Bauza para sucederlo. Las siete derrotas consecutivas de Tiro Federal en el arranque del torneo arrastraron a Jorge Castelli, cuyo puesto fue ocupado por Jorge Solari. Sin embargo, por más que el equipo había levantado, el ex técnico de Arabia Saudita en el Mundial ’94 dejó el club tras la caída 4-1 con Argentinos.
Los otros dos conjuntos rosarinos también debieron reemplazar a los técnicos con los que iniciaron el torneo. En Newell’s, el chileno Juvenal Olmos no soportó la derrota en el clásico por la Copa Sudamericana y el flojo arranque en el Apertura. Tras un interinato de tres partidos de José Machetti, el elegido para el cargo resultó Nery Pumpido. En Central, ni la clasificación en la Sudamericana a manos de Newell’s salvó a Ariel Cuffaro Russo, que dio un paso al costado para el noveno retorno de Angel Tulio Zof. Néstor Gorosito, en Lanús, y Jorge Theiler, en Instituto, tampoco resistieron la tormenta de los resultados.