El plantel de Boca festejó ayer el cumpleaños número 34 del goleador Martín Palermo, a quien antes del inicio de la práctica le regalaron una torta alusiva. “Estoy contento no sólo por el cumpleaños, sino porque el equipo viene levantando, pero más allá del triunfo, lo importante es que se recuperó la forma de jugar, el pelear cada pelota, estar concentrados, ya que todos ayudamos para el triunfo”, manifestó el goleador, y luego concluyó: “Quedan cuatro finales y, con esas ganas, Boca podría pelear hasta lo último el campeonato”. Luego del festejo íntimo, el plantel se entrenó en Casa Amarilla, con excepción de Mauricio Caranta, quien hizo un trabajo diferenciado y finalmente fue descartado para el choque con Vélez.