Héctor Rivoira se convirtió en el segundo entrenador en perder su cargo en la disputa del Apertura 2010, después de Daniel Garnero, al renunciar a la dirección técnica de Huracán, que viene de perder 3-0 con Gimnasia. Juan Ramón Fleitas se hará cargo del equipo hasta que se contrate a un nuevo entrenador, que podría ser Miguel Brindisi, Fernando Gamboa o Roberto Pompei, en ese orden de prioridad. Rivoira era resistido por los hinchas, más allá de los flojos resultados, porque, aunque es un reconocido simpatizante de Huracán, el estilo que lo seduce tiene poco que ver con el que identifica al club de Parque de los Patricios.

“No sé por qué la gente está tan politizada en Huracán. Todo eso lleva a que se confundan un poco. Deportivamente no hay mucho que cuestionar, cuando agarramos este compromiso Huracán estaba en una situación dificilísima”, señaló Rivoira, que se hizo cargo del equipo tras la salida de Angel Cappa, en diciembre pasado. “Nosotros tratamos de cambiar la imagen, y en esta etapa, el equipo alternó buenas y malas”, señaló. “Hubo un clic en el empate contra Banfield. En ese momento vi que la gente silbaba al equipo, a mí y a Carlos (Babington, el presidente), y me pareció injusto. Ahí empecé a pensar en dar un paso al costado”, dijo Rivoira.