De hablar pausado y reflexivo, Daniel Prieto Castillo, un mendocino nacido en el año ’42, es ante todo un maestro, un pedagogo, aunque su título académico lo presente primero como Licenciado en Filosofía y luego como doctor honoris causa en Comunicación Social por la Pontificia Universidad Bolivariana de Medellín (Colombia). Como tantos argentinos, marchó al exilio en tiempos de la dictadura y sus distintas etapas latinoamericanas (México, Ecuador, Costa Rica) lo fueron consolidando como un hombre de visión latinoamericana, preocupado por la gente y por los procesos educativos. Con el también educador costarricense Francisco Gutiérrez escribió La mediación pedagógica (1991), seguramente su obra más importante dentro de una galería que ya incluye 44 libros de autoría exclusiva, más otros nueve escritos en colaboración. Fue secretario académico de la Universidad Nacional de Cuyo (1994-97), es uno de los más reconocidos expertos latinoamericanos en educación a distancia, fue coordinador del proyecto de Educación a Distancia de la Universidad Nacional de Cuyo (1999-2001) y actualmente dirige la carrera de posgrado de Especialización en Docencia Universitaria, que él mismo creó en 1995 en la misma casa de altos estudios.