El Poder Ejecutivo enviará el próximo lunes el proyecto de Ley de Presupuesto 2009, que establecerá un dólar promedio en 3,19 pesos, un crecimiento del PBI de 4 por ciento y un índice de inflación que se colocará entre 7 y 9 por ciento anual. Desde el Ejecutivo señalaron a PáginaI12 que habrá una baja en los subsidios (a nivel general) del 9 por ciento, “con el objetivo de consolidar el superávit fiscal”, que para el año próximo sería de 3 por ciento del PBI. También confirmaron a este diario que el jefe de Gabinete seguirá conservando sus facultades (superpoderes) para reasignar partidas presupuestarias. A su vez, se mantendría la emergencia económica, uno de los temas que más criticará la oposición.

Como ocurre desde que se inició la era Kirchner (con Néstor y Cristina), el Ejecutivo enviará un proyecto presupuestario con estimación de crecimiento cautelosa. Este año el PBI crecería en torno del 8 por ciento, como viene sucediendo desde hace un lustro. En 2009, el crecimiento pautado en la ley de presupuesto será del 4 por ciento. Si hay un excedente, podrá ser manejado por el jefe de Gabinete, Sergio Massa, a partir de la delegación de facultades. Desde 2006, los “superpoderes” tienen que ser aprobados como parte de la ley de Administración Financiera y no con un artículo dentro del Presupuesto.

Desde el Ejecutivo indicaron a este diario que en el proyecto también estarán comprendidas las erogaciones para cubrir la compra de las acciones de Aerolíneas Argentinas, las inversiones por el Tren Bala y la movilidad jubilatoria. La reducción en los subsidios, que rondará entre el 8 y 9 por ciento, además de “consolidar el superávit fiscal”, como dicen desde el Gobierno, será la antesala para la readecuación tarifaria de los servicios públicos, que se abrirá a partir de febrero.

El ministro de Economía, Carlos Fernández, concurrirá a Diputados hacia el final de la semana próxima para explicar los lineamientos del proyecto. Fernández estuvo reunido la semana pasada con el titular de la Comisión de Presupuesto del Senado, Fabián Ríos, para acordar que todas las modificaciones que quieran “sugerir” los senadores K se hagan durante el tratamiento en Diputados. El objetivo es “modificar lo que haya que modificar” en la Cámara baja y aprobar la ley lo antes posible.

La oposición (UCR, CC, PRO, peronistas disidentes) ya adelantó que hará todo lo posible para “voltear” la delegación de facultades hacia el jefe de Gabinete. También insistirán en que “hay que terminar con la emergencia económica”. El diputado Jorge Sarghini, ex secretario de Hacienda de Eduardo Duhalde, señaló que “la eliminación de los superpoderes es una condición previa para que el debate sea algo serio. Si fuera de otra manera, se convertiría el presupuesto en una verdadera falacia”.