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La concesión del Corredor Vial Integrado del Atlántico, formado por la Autovía 2 y las rutas 11, 36, 56, 63 y 74, se traspasará hoy a un conjunto de empresas propiedad de los grupos Roggio y Eurnekian. El contrato que regula la nueva concesión de la explotación del sistema de peajes tiene una duración de 30 años y obliga a realizar obras que demandarán una inversión de 8 mil millones de pesos. Entre los más importantes proyectos viales está la construcción de la doble mano de la ruta 11, entre General Conesa y San Clemente del Tuyú.

La propuesta ganadora fue aprobada por el Ministerio de Infraestructura y por una comisión bicameral de la Legislatura provincial. Las empresas Benito Roggio e Hijos y Esuco y Helport, del grupo Eurnekian, ofertaron en la licitación un valor promedio de 29,80 pesos el precio del peaje en la estación Samborombón, frente a 33,50 pesos ofertados por el grupo Eskenazi, con un tope máximo fijado por el gobierno provincial de 35,90 pesos. Los nuevos valores se aplicarán a partir del sexto año de concesión, en tanto habrá su-bas graduales de acuerdo con las obras que realice la concesionaria. Actualmente, ese peaje cuesta 12 pesos y 14 pesos los sábados, domingos y feriados. Las precios en las cabinas de Maipú, en la Ruta 2; y Conesa y Mar Chiquita en la 11, tendrán sus propios cronogramas de aumento.

Las empresas deberán, por contrato, construir la doble mano de la ruta 11 entre General Conesa y San Clemente del Tuyú, además de otros 60 emprendimientos viales durante los 30 años de concesión, trabajos que demandarán una inversión de más de 8 mil millones de pesos. Se obliga a las empresas a construir casi 1200 kilómetros de nuevas rutas, un 25 por ciento más que en la actualidad. Durante la concesión no se podrán instalar nuevos lugares de cobro de peaje.

La empresa Covisur, actual concesionaria de la Autovía 2, quedará a cargo sólo del tramo Dolores-Mar del Plata, donde está el peaje de Maipú, hasta 2016, cuando concluye el contrato. En cambio, el contrato con Caminos del Atlántico, que opera sobre la ruta 11 y vence en septiembre, será rescindido y la empresa recibirá a cambio una indemnización de 60 millones de pesos, que correrá por parte del nuevo concesionario.