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El Gobierno pretende que la industria forestal crezca a un ritmo del 9 por ciento anual hasta 2020 y pase a ser superavitaria en términos de comercio exterior. El Ministerio de Industria organizó ayer el noveno foro del Plan Estratégico Industrial 2020, donde convocó a representantes de los sectores de la madera, el mueble, celulosa, papel y gráfica, que integran la cadena de valor forestoindustrial. “Tenemos una ventaja natural competitiva por la riqueza forestal de nuestro país, que nos permite seguir fortaleciendo las economías regionales. El camino es agregar valor en origen, sustituir importaciones y dar un salto exportador”, sostuvo la ministra de Industria, Débora Giorgi.

En la actualidad la producción de la industria forestal llega a 11 mil millones de dólares anuales en toda la cadena, habiendo crecido un 120 por ciento respecto de 2003. Está integrada por unas 15 mil pequeñas y medianas empresas y ocupa cerca de 160 mil personas, un 48 por ciento por encima del valor de 2003. El empleo creció especialmente en el sector muebles. Su posición neta externa es deficitaria en 426 millones de dólares.

Argentina tiene 33 millones de hectáreas de bosque nativo y 1,2 millón de hectáreas de bosque implantado, que, según Giorgi, pueden llegar a cinco millones “sin competir con otras producciones”. Industria asegura que la productividad de los bosques locales implantados es siete veces mayor que los de los países desarrollados.

Durante el foro surgieron varias propuestas para impulsar el desarrollo del sector. Por ejemplo, en madera y carpintería de obra, favorecer la asociatividad entre empresas, la especialización para ganar escala y las mejoras tecnológicas para impulsar las exportaciones. En madera y muebles, la adquisición de tecnología y nuevos diseños para poder colocar la producción en mercados externos. En el sector de celulosa y papel se analizó la necesidad de sustituir importaciones y buscar impulsar el consumo de papel. Argentina consume 64 kg anuales por habitante, mientras que Chile lo hace por 81 kg y los países desarrollados, por 170 kg. También se hizo hincapié en la necesidad de impulsar la fabricación local de maquinaria para el sector, de manera de reducir las importaciones.

Del encuentro participaron representantes de Buenos Aires, Santa Fe, Chaco, Misiones, Formosa, Córdoba, Corrientes y Jujuy. La proyección de Industria se sostiene sobre estimaciones favorables en el horizonte de demanda mundial, a partir de la escasez de tierras en los países desarrollados y un aumento de la demanda para generar energías alternativas, como la biomasa. Además, Giorgi destacó las “bajas barreras arancelarias en el mundo para la celulosa”.

En Industria estiman que, de mantenerse la actual tendencia, en 2020 el sector alcanzaría una producción de 15.800 millones de dólares con un déficit externo de 2700 millones, 350 millones correspondientes a muebles y madera y productos para la construcción y 2300 millones de papel. Pero el Gobierno busca que el escenario sea diferente. A través de la aplicación de las medidas propuestas en el foro, pretende que la industria forestal produzca por más de 26 mil millones, genere 63 mil empleos y sea superavitaria en 540 millones de dólares. En madera y muebles, papel y gráfica hay vigentes licencias no automáticas de importación.