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La intervención del Banco Central mantuvo equilibrado ayer al dólar en la plaza porteña, donde cerró en 4,23 pesos, mientras que su par brasileño debió actuar con firmeza para frenar el desplome del real. La moneda brasileña había caído en el inicio de la rueda un 5 por ciento, hasta alcanzar 1,96 por dólar. El Banco de Brasil intervino entonces con ventas masivas, que llevaron la cotización a 1,891 con que cerró. “Las recientes fluctuaciones de monedas de países emergentes se deben a una creciente aversión al riesgo y no sabemos hasta dónde llegará esta situación”, señaló el ministro de Hacienda de Brasil, Guido Mantega, durante una conferencia de prensa en el marco de la Asamblea Anual del Fondo Monetario que se realiza en Washington.

El dólar se apreció de manera generalizada frente a las principales monedas mundiales, tendencia que también intentó imponerse en la región. Durante la rueda de ayer, el Banco Central brasileño desplegó todo su poder de fuego para detener la suba del dólar. Aunque no se informó oficialmente, fuentes del mercado estiman que la autoridad monetaria brasileña vendió unos 5000 millones de dólares en reservas y títulos vinculados, el equivalente a lo que el Banco Central argentino destinará el año próximo para el pago de vencimientos de deuda. El stock de reservas del BCRA bajó a 49.136 millones de dólares, dado que hizo un pago por compensaciones con Brasil en comercio exterior.

“Cuando el riesgo aumenta, el movimiento contrario del real respecto del dólar es normal. No obstante, no llegó a los niveles de desvalorización que ocurrieron en 2008, si bien no sabemos hasta qué punto llegará”, reconoció Mantega. En el último mes el real se devaluó desde 1,56 a 1,89 por dólar. La caída acumulada del real supera al 18 por ciento desde el 31 de agosto, cuando el Banco de Brasil redujo la tasa de referencia (Selic) a 12 por ciento desde 12,5, que permitió detener un fuerte ingreso de capitales que amenazaba con ralentizar el crecimiento.

En la city porteña, el Central no intervino en el mercado mayorista de dólares. Sólo realizó algunas operaciones puntuales con contratos a futuro, principalmente en los vencimientos de septiembre y octubre. Con la ausencia de la autoridad monetaria, la cotización entre bancos –negocios de más de un millón de dólares– recuperó un centavo (a 4,20 pesos). Sin embargo, ese avance no se replicó al público. El volumen operado ascendió a 550,7 millones de dólares, mientras que se negociaron otros 357,1 en futuros.