La actividad industrial creció 1,8 por ciento interanual en marzo, impulsada por la elaboración de materiales ligados a la construcción y la industria química, mientras que registraron bajas el sector automotor y el textil, informó ayer el Indec. En el primer trimestre el crecimiento acumulado es de 1,1 por ciento. En relación con febrero, el avance fue de 1,9 por ciento, lo que implica que a pesar de que el ritmo de expansión es más débil que el año pasado, existe un repunte en el margen. Esa tendencia todavía no se refleja a nivel trimestral: si se compara el primer trimestre de 2012 con el último del año pasado, la industria muestra una caída de 0,7. La desaceleración industrial también se refleja en la reducción en el ritmo de crecimiento de las importaciones, ya que buena parte de los insumos y equipos utilizados en la actividad manufacturera proviene del exterior.

El crecimiento de la actividad industrial fue de mayor a menor en 2011. La comparación interanual arrancó con subas del orden del 8 por ciento, para cerrar el año con un avance del 2 por ciento. En febrero se registró una caída de 0,8 por ciento, la primera desde septiembre de 2009, cuando impactó de lleno la crisis internacional en la economía local. En cuanto a la comparación mensual, que permite analizar en forma más precisa la dinámica de la industria, en diciembre la suba fue de 0,5, pero en enero y febrero las bajas fueron de 1,5 y 1,4 por ciento, respectivamente. Esa racha negativa se rompió en marzo, con una suba de 1,9 por ciento.

La industria alimentaria registró un avance de 1,3 por ciento frente a marzo del año pasado, a raíz del crecimiento de bebidas (7,4 por ciento), lácteos (8,2) y carnes blancas (3,1 por ciento). Fue particularmente pronunciada la caída de yerba mate, del 18,4 por ciento, que en el primer trimestre llega al 17 por ciento. El sector transcurrió en los últimos meses por una intensa puja por la rentabilidad. El Gobierno autorizó una suba en el precio al productor de casi el ciento por ciento, aunque en la medida en que ese aumento de costos no sea absorbido por la propia cadena de producción y en cambio se refleje en las góndolas, se autorizará la importación, aseguró la Presidenta, Cristina Fernández.

Un sector que sobresalió fue el químico, creció 11,8 por ciento anual por el avance en agroquímicos, detergentes, jabones y productos farmacéuticos. También registraron una suba muy por encima de la media los productos minerales no metálicos, vinculados con el sector de la construcción. La producción de vidrio creció 9,8 por ciento y la de cemento, 5,9. En la industria siderúrgica, el acero crudo avanzó 5,1, pero el aluminio primario cayó 13,8 por ciento.

Un factor fundamental para explicar la desaceleración industrial es el rendimiento del sector automotor, que en marzo cayó 5,1 por ciento. Frente a febrero, la dinámica automotriz mejoró sensiblemente, ya que experimentó un crecimiento de 20,4 por ciento. Es determinante para el sector el estancamiento industrial en Brasil, hacia donde se destina buena parte de la producción local. Por su parte, la industria metalmecánica avanzó 1,9 por ciento interanual y 7,1 en forma mensual.

El sector textil también mostró diferencias en el rendimiento anual respecto del mensual. En la comparación frente a 2011 la baja fue de 2 por ciento, traccionada por fibras sintéticas y artificiales y tejidos. En cambio, en relación con febrero mostró una suba de 4,4 por ciento. La refinación del petróleo, con una dinámica similar, bajó 3,7 por ciento de manera anual aunque subió 8,6 por ciento respecto de febrero. En relación con las expectativas empresarias para el segundo trimestre, que releva el Indec, el 71,2 por ciento de las firmas anticipó un ritmo de demanda estable y el 17,6 por ciento una suba.