La petrolera española Repsol demandó en los tribunales de Nueva York al Banco BNY Mellon, aduciendo que éste, como depositario de títulos representativos de acciones de YPF (ADR), no había respetado las instrucciones de voto recibidas para la junta de accionistas del 4 de junio de la petrolera argentina. Repsol, según argumentó en la demanda, tenía derecho a dar instrucciones de voto tanto sobre las ADR de su titularidad no sujetas a expropiación (6,4 por ciento del capital social) como respecto de la participación que el grupo Petersen (familia Eskenazi) le tiene dado en prenda (5,38 por ciento del capital de YPF). De esta forma, Repsol no habría podido hacer valer el total de su participación (aproximadamente el 12 por ciento) en la asamblea de accionistas y pudo designar, en consecuencia, a un solo miembro en el directorio. “En caso de haber cumplido el banco las instrucciones dadas, Repsol podría haber nombrado tres representantes”, asegura la firma española en su presentación. En la demanda se indica que Repsol “ha sufrido un daño irreparable al haber sido significativamente disminuida su participación minoritaria”.