Efectivos policiales realizaron ayer un allanamiento en una casa de cambio ilegal del microcentro porteño que tendría vínculos con la barra brava de Boca. En el operativo fueron detenidas cinco personas. Fuentes judiciales indicaron que el procedimiento se realizó por “venta de divisas y de entradas”. El procedimiento se hizo en el mismo lugar que en agosto pasado y estuvo encabezado por el juez de instrucción Manuel De Campos. El magistrado investiga varias causas ligadas a La 12 y sus presuntas vinculaciones con dirigentes de clubes y policías. Durante el allanamiento, los investigadores secuestraron computadoras, teléfonos celulares y otros elementos de interés.

En agosto último, el propio jefe de la Policía Federal, Román Di Santo, recibió un mensaje intimidatorio en su casa, vinculado con las investigaciones que la fuerza lleva adelante sobre la barra brava de Boca. La megacausa que involucra a la hinchada xeneize, y alcanza a las autoridades de Boca, se inició en agosto de 2011 con el crimen de Ernesto Cirino, un vecino del barrio porteño de Liniers. Por ese hecho fueron detenidos el entonces jefe de la hinchada, Mauro Martín, y su segundo, Maximiliano Mazzaro, entre otros.

Durante la instrucción de esa causa, el juez comenzó a investigar una supuesta asociación ilícita entre miembros de la barra brava y de la dirigencia del club mediante el presunto alquiler de carnets de socios falsos, con el fin de obtener fondos. Por conexidad, el juez De Campos también pidió la causa en la que se investiga el crimen de dos hinchas de Boca en la previa del partido que el equipo xeneize iba a disputar frente a San Lorenzo, en el estadio del Bajo Flores. Los investigadores determinaron que esos homicidios fueron consecuencia de una nueva pelea entre la facción oficial de La 12, actualmente liderada por Cristian “Fido” Debaux, y un grupo que responde al ex jefe de la hinchada Rafael Di Zeo.