El propietario del supermercado mayorista Maxiconsumo, Víctor Fera, aseguró ayer que las grandes cadenas de comercialización “son formadores de precios”, denunció casos de abuso en la remarcación y desafió “públicamente a Alfredo Coto a debatir si son o no formadores de precios: son los únicos formadores de precios”. El dueño de la cadena homónima había compartido esta semana un acto con el presidente de la Nación, Mauricio Macri, y la gobernadora María Eugenia Vidal, tras lo cual hizo declaraciones en respaldo al actual mandatario, quien había expresado su preocupación por la inflación, pero que llevaría por lo menos tres años llegar a una variación de un dígito (menos del 10 por ciento). Coto, ese mismo día, refirió que la inflación actual no la iba a resolver “ningún mago de la noche a la mañana, la inflación alta va a seguir tres o cuatro años más, de a poco los precios se tienen que ir controlando y bajando”. Al mismo tiempo, rechazó que su sector sea formador de precios y tenga responsabilidad sobre la aceleración de la inflación de los últimos tres meses. “Es necesario producir más para que los precios bajen”, contraargumentó Coto.

“Es indudable que es falso y mentiroso que no sean formadores de precios”, le respondió ayer Fera, 48 horas después de las declaraciones de Alfredo Coto. “Ellos tienen sus propias marcas de productos secos, de arroz, de fideos, entonces forman precios”, indicó el proveedor mayorista, además dueño de las marcas Marolio y Molto. “El precio al público de la leche es un asalto a la población”, puntualizó, “el producto llega a los supermercados en un promedio de 7,50 pesos el litro y le remarcan el ciento por ciento”. También señaló que los hipermercados como Coto “tienen frigorífico, compran en pie el ganado, lo faenan y van directo al público, no hay siquiera intermediarios”. Así, apuntó, “si un kilo de novillo vale 24 pesos a la salida del frigorífico, no puede valer más de 80 pesos un kilo de milanesas”.

El titular de Maxiconsumo también precisó que las grandes cadenas sacan ventaja de las condiciones comerciales en las que compran. “A los productores les pagan a los 90 días, y a los que están desesperados (en condiciones financieras ahogadas) les compran la factura por otro lado a un valor mucho menor”, sugirió. “Las cadenas son netamente individualistas, hubo aumentos desmedidos en los precios; si este Gobierno quiere que el Estado sea eficiente, la Secretaría de Comercio tiene que actuar en forma inmediata, no dentro de 90 días.”