ECONOMíA › POR PRESION DE BONISTAS, LA PROVINCIA IRIA AL DEFAULT
Los buitres acechan a Mendoza
En Mendoza dicen que sería “la última carta”, pero que están dispuestos a jugarla: dejar de pagar a los acreedores en caso de que la Justicia de los Estados Unidos insista en trabar la reestructuración de su deuda por pedido de un “fondo buitre”. La posibilidad de que la provincia caiga en default dos años y medio después que la Nación y a poco de que se cierre trato con los bonistas alteró al Gobierno. Advertido de la jugada extrema que analizan en Mendoza, Roberto Lavagna puso a disposición del gobernador Julio Cobos el cuerpo de abogados que asesora a la Argentina en Nueva York.
A diferencia del Estado nacional, Mendoza evitó el default. Pero puso en marcha una reestructuración de su deuda. La propuesta fue reformular el bono Aconcagua, emitido en 1997: en vez de pagar una tasa anual del 10 por ciento ofertó reducirla al 5,5, mientras que estiró el vencimiento del 2007 al 2017. Las antiguas condiciones del bono redundaron en que ya se pagara el 70 por ciento de los 250 millones de dólares de la emisión.
Según Cobos, la propuesta –que excluye una quita de capital– ya fue aceptada por más de la mitad de los acreedores, condición necesaria para modificar las condiciones del título. Sin embargo, el proceso quedó suspendido a pedido del fondo “buitre” Greylocke Global Opportunity, que está manejado por Hans Humes, un conocido de la Argentina por su pertenencia al GCAB, el grupo de acreedores global que también tiene a Nicholas Stock en sus filas. Estos inversores se negaron a la quita propuesta por Mendoza y presentaron un recurso de amparo ante los tribunales de Nueva York. Anteayer, el juez Harold Baer se hizo eco de este reclamo y dispuso la suspensión del proceso.
Si bien Cobos aseguró que se abonará, el próximo 20 de octubre, la primera cuota a los bonistas que aceptaron el canje, fuentes mendocinas admitieron que se está analizando dejar de pagar si persiste la traba. Mendoza presentará sus argumentos el miércoles que viene y dos días después habrá una audiencia de conciliación. El gobernador dijo que el “fondo buitre” posee tan sólo el 1 por ciento del bono Aconcagua.
Pero más allá de estos tironeos resulta interesante rescatar el motivo de la emisión del Aconcagua. El diputado mendocino de la UCR Víctor Fayad recordó, en diálogo con este diario, que ese endeudamiento fue tomado por el entonces gobernador Arturo Lafalla para devolverle a la Nación los fondos que habían sido tomados previamente para el saneamiento de los bancos provinciales Mendoza y Previsión Social. A pesar de eso, el destino de las entidades no pudo ser peor: fueron privatizadas a manos del República de Raúl Moneta y luego quebraron, bajo denuncias de irregularidades. Los ciudadanos mendocinos siguen pagando (y penando) aquella deuda.