ECONOMíA › BRASIL EN ESTADO DE ALERTA ANTE LA CRISIS DE ARGENTINA
“No estamos a salvo de un contagio”
La crisis argentina puede terminar contagiando a Brasil o, al menos, sus autoridades terminaron por admitirlo. El ministro de Economía de ese país, Pedro Malan, reconoció ayer por primera vez el impacto de la debacle argentina. “Sería una ingenuidad pensar que el agravamiento de la situación argentina no terminaría contagiando a Brasil”, señaló Malan, a pesar de que su estrategia hasta el momento era despegarse del principal socio del Mercosur.
El reconocimiento de la situación se dio a la par del contacto que tuvo Roberto Lavagna con el ministro brasileño de Relaciones Exteriores, Celso Lafer, quien le expresó “el apoyo político y económico de Brasil” a su gestión. Los ministros, que se conocen desde los años 80, ratificaron que las relaciones comerciales entre ambos países serán prioritarias. Sin embargo, Malan salió ayer a puntualizar que la crisis argentina produjo una significativa caída de las exportaciones de su país hacia aquí y que la tendencia sigue en baja.
Malan puso como ejemplo del contagio el hecho de que las exportaciones brasileñas hacia Argentina, que representaron el 13 por ciento de total en el 2000, cayeron al 8 ciento el año pasado y mantienen la tendencia decreciente en lo que va del 2002. Además, en San Pablo se adjudica al “efecto Tango” la reducción en la calificación de los títulos de deuda brasileña dispuesta por dos calificadoras de riesgo, a lo que se sumó la recomendación de no comprar títulos brasileños de los bancos Morgan Stanley y Merrill Lynch.