ECONOMíA › LEGISLADORES ITALIANOS DE LA
OPOSICION DE GIRA POR EL DEFAULT
Quién paga la estafa de los bancos
Los bancos italianos transfirieron los 14.500 millones de dólares de bonos argentinos a sus clientes. Un grupo de diputados quiere que las entidades se hagan cargo. En un reportaje con Página/12, tres de esos legisladores reclaman, además, que Argentina pague más.
Por Claudio Scaletta
Giorgio Benvenuto, Luigi Olivieri, Demócratas de Izquierda, y Giovanni Didoné, de la Liga Nord, los tres diputados italianos que vinieron a reconocer in situ la situación argentina, tuvieron suerte. A pesar de haber viajado por cuenta propia, fueron recibidos por la plana mayor del Gobierno. Nada mal para una visita que ni siquiera contó con el aval del Parlamento de su país. Para Economía tenían a favor que impulsan un proyecto que asume la corresponsabilidad de los bancos peninsulares (ver aparte). Sin embargo, también demandan que la Argentina mejore su oferta. Y tienen el esquema: una reforma fiscal. No obstante, también abogaron para que las dos naciones mejoren sus relaciones y recuperen sus lazos históricos. El siguiente fue el diálogo que tuvieron con Página/12.
–¿Por qué están en la argentina?
G. Benvenuto: –Porque en Italia tenemos una situación muy pesada, con 450 mil ahorristas que fueron afectados por el default. Y tenemos una anomalía, mientras que en otros países los bonos están principalmente en poder de grandes inversores, en Italia, sobre un total de 14 mil millones de dólares de deuda, 13.500 están en poder de pequeños ahorristas y sólo 500 en poder de los grandes. Desde fines del 2001, en el Parlamento nos preocupamos por la inacción del gobierno y por entender cómo se produjo esta situación.
–¿Los bancos italianos están comprándoles los bonos a los ahorristas?
G. B.: –Es lo que se dice, pero nosotros partimos de los reclamos que nos hicieron los ahorristas, de esta anomalía.
–¿La banca italiana les transfirió a sus clientes los títulos de deuda que tenían en cartera?
G. B.: –Es lo que estamos tratando de averiguar, por eso vinimos a la Argentina. No fue posible un viaje oficial del Parlamento italiano, por eso decidimos venir por nuestra cuenta.
–¿Cuál es el estado de ánimo de la opinión pública italiana?
G. Didoné: –No es nada bueno.
G. B.: –Hay que comprender que son muchos los involucrados, casi dos millones de personas si se incluye a las familias, y que es mucho el dinero en juego, casi 2 por ciento del Producto.
–¿Cree que toda la culpa de esta situación desafortunada es de la Argentina?
G. D.: –Primero es de Argentina, que dejó de pagar
–¿Pero ustedes no están tratando de averiguar cómo títulos de altísimo riesgo llegaron a manos de los pequeños bonistas?
G. B.: –Los encuentros que estamos teniendo es para tener más elementos. Voces hay muchas.
–¿No están presentando un proyecto que corresponsabiliza a los bancos?
L. Olivieri: –Nosotros creemos que muchas de las colocaciones no se hicieron respetando la legislación italiana. Es difícil creer que un pequeño ahorrista, un pensionado, un trabajador, que a lo mejor tuvo en mano una indemnización, haya invertido su dinero en títulos de tan alto riesgo, que no haya sido advertido del peligro. Igual no debe olvidarse que tuvimos durante 10 años al FMI diciéndonos que Argentina era un ejemplo. En algunos casos puede haber ocurrido que se tratase de personas que estaban acostumbradas a invertir en títulos del Estado italiano, que antes de la entrada al sistema del euro rendían hasta el 9,0 por ciento anual, pero que después pasaron a pagar el 2,0 o el 2,5, y que pueden haber creído que podían seguir manteniendo ese nivel de renta.
–¿A qué se debe que fuerzas políticas tan dispares, como la Liga Nord y los Demócratas de Izquierda, tengan la misma postura?
G. D.: –El problema no es entre nosotros, sino de 450 mil ahorristas que nos reclaman en el Parlamento. Nosotros somos un partido popular que interviene en un gobierno que consideramos serio (el de Berlusconi). Eso no quita que queramos proteger a los ahorristas del problema que tienen.
–¿Hay alguna posibilidad de que esta ley sea finalmente aprobada?
L. O.: –En la correlación de fuerzas actual, no.
G. B.: –Creemos, sin embargo, que el viaje a la Argentina servirá para darle más fuerza. Además discutimos en el Parlamento una ley más general para proteger los intereses de los ahorristas, para que no vuelvan a suceder casos como los de Cirio, Parmalat o el que nos ocupa.
–¿A quién representa Nicola Stock?
L. O.: –A 450 mil ahorristas, tiene las delegaciones.
–¿No representa a los bancos?
G. B.: –Nosotros no queremos polemizar con Stock. Ciertamente a nosotros no nos representa, no le dimos la delegación, nosotros estamos aquí en representación de quienes nos votaron.
–¿Creen que la Argentina debería mejorar su oferta?
G. B.: –Sí.
–En Argentina hay quienes dicen que incluso la actual es una propuesta difícil de pagar.
G. B.: –No es lo que nos dijeron los funcionarios del Gobierno con los que nos reunimos hoy. Según ellos, con esta propuesta están cambiando un estilo de prometer lo que no podían pagar.
–¿Conocen las cuentas públicas argentina?
L. O.: –Nos dieron un prospecto en inglés que tendremos que traducir, pero las conocemos. En realidad, lo que nosotros le preguntamos al Gobierno es con qué piensa sostener la propuesta, porque recaudan demasiado poco. La recaudación es sólo el 22 por ciento del Producto. Nosotros en Italia recaudamos el 40. Además el sistema es injusto, porque se basa en impuestos indirectos. Nosotros pagamos un 41 por ciento de impuesto sobre las ganancias. Si quieren sostener una deuda que superará el 90 por ciento del Producto y además tener un plan de desarrollo, tendrán que cambiar el sistema fiscal y hacer un relanzamiento productivo.