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Al mediodía se reunieron con el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y al caer la tarde llegó el turno del encuentro con Roberto Lavagna, en el Ministerio de Economía. La delegación de diputados italianos que desembarcó en Buenos Aires tuvo ayer un día movido. Además de entrevistarse con los dos ministros de mayor peso en el Gabinete de la administración Kirchner, mantuvieron un encuentro con representantes de la Mesa del Diálogo Argentino, de quienes requirieron información sobre la situación social del país.
Los parlamentarios impulsan una iniciativa para corresponsabilizar de la pérdida que tuvieron los ahorristas y jubilados italianos que compraron bonos argentinos defaulteados a los grandes bancos de ese país, que les recomendaron comprar títulos en los tiempos en que la suerte de la convertibilidad ya estaba echada.
“Necesitamos saber si es real que la Argentina no puede pagar más, porque los bonistas no están contentos con la oferta y tampoco el Comité Global de Bonistas”, explicó a la prensa Luigi Olivieri, de la opositora Democracia de Izquierda, un planteo que también desplegó en los despachos oficiales. “Los bancos italianos abandonaron a sus ahorristas”, agregó su colega Giovanni Didoné, del mismo partido.
Según Olivieri, los bancos “no han advertido a los ahorristas del peligro que acarreaban estos bonos, porque en el 2001 era previsible el crac social y económico de la Argentina”, y aun así siguieron vendiendo bonos a sus clientes.
Didoné fue aún más allá: el gobierno de Berlusconi no adopta una posición más severa respecto del sistema financiero italiano “porque hacia el interior del gobierno y del Parlamento hay banqueros, y entonces no es libre para actuar. Está condicionado”, denunció.
Pese a que este discurso sonó a música en los oídos de Lavagna y Fernández, el trío de legisladores también dejó en claro que, a su entender, la Argentina estaría en condiciones de pagar más a los bonistas (ver aparte).
De la reunión con la Mesa del Diálogo Social participaron representantes de Cáritas, AMIA, la Asociación Cristiana de Jóvenes, la Comunidad Bet-El, el Grupo Fénix y las Abuelas de Plaza de Mayo. Allí, los parlamentarios italianos solicitaron una descripción de la situación social. Según la titular de Abuelas, Estela de Carlotto, también se hizo una muestra de la política impositiva local, que, en su opinión, no cargaría lo suficiente sobre las empresas y los sectores de mayores ingresos.
La agenda para hoy de la troupe italiana incluye reuniones con el canciller Rafael Bielsa; el titular del Banco Central, Martín Redrado; con los presidentes de la comisión de Presupuesto de la Cámara baja, Carlos Snopek, y de Finanzas de Diputados, Rodolfo Frigeri, y con el titular del cuerpo, Eduardo Camaño. También tienen previsto entrevistas con empresarios italianos, entre los que se encuentran Franco Livini, Sergio Enaudi y Cristiano Rattazzi.