ECONOMíA › SONDEO OFICIAL EN SUPERMERCADOS
Carnes indomables
Por M. M.
El último relevamiento oficial de precios, que llega hasta la tercera semana de marzo, confirma que el rebrote inflacionario no es generalizado sino puntual: hay precios que suben y otros que bajan, más allá de la estacionalidad propia en un sentido o en otro de algunos productos. Sin embargo, la encuesta también muestra que el Gobierno no ha logrado disciplinar los precios de la carne y el pollo ni siquiera en los supermercados. En tres semanas de marzo, el precio de la carne en las góndolas aumentó un 6 por ciento, y hasta el lunes pasado el precio promedio del kilo de pollo era de 4,51 pesos, muy por encima de los 3,80 que había pactado con los supermercadistas la Secretaría de Agricultura.
El sondeo, realizado semanalmente por la Subsecretaría de Defensa del Consumidor, se basa en los precios de una canasta de 59 productos, medidos en todas las cadenas de supermercados de la Ciudad de Buenos Aires. Según los últimos datos, que ya están en poder de Roberto Lavagna, durante las tres primeras semanas de marzo, 26 productos subieron de precios, mientras que 31 bajaron y 2 se mantuvieron sin cambios.
Entre los productos más remarcados sobresalen –además de las verduras que muestran típicos ajustes estacionales– la carne, los huevos y el vino (ver cuadro). En el caso de la carne, esos datos revelan que los acuerdos firmados por Agricultura con el sector ni siquiera surtieron efecto en los supermercados. Es cierto que dichos acuerdos se referían sólo a 5 cortes populares y que el relevamiento de Defensa del Consumidor toma en cuenta un promedio de precios de 16 cortes. Pero igualmente el aumento del 6 por ciento en sólo tres semanas refleja que los incrementos en el sector son generalizados e importantes.
Recién el miércoles a última hora, Agricultura logró cerrar un acuerdo con las cámaras de carnicerías y frigoríficos para que las rebajas del 10 por ciento en los cortes populares lleguen a los mostradores de los locales que venden el 60 por ciento del consumo de carnes en el país. El arreglo establece que los frigoríficos vendan la media res con un descuento del 2 por ciento a las carnicerías. El titular de la Cámara que agrupa a estos comerciantes minoristas prometió ayer que la semana próxima las rebajas, finalmente, llegarán a los mostradores.
Por otro lado, Agricultura mantiene abierta una negociación con representantes del sector de la yerba mate. El precio de la popular infusión aumentó 30 por ciento en el último año. Si el Gobierno autoriza elevar el precio sostén para los productores de 30 a 40 centavos, “el kilo de yerba podría pasar a costar de 4 pesos a 5,20”, amenazó ayer Roberto Montechiesi, de la Cámara de Molineros de Misiones y Corrientes. La réplica de Economía es que los márgenes de la industria y de la comercialización son exorbitantes.