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“Indudablemente, un tanto elevada.” Así calificó el secretario de Finanzas, Guillermo Nielsen, a la tasa de interés que debió afrontar el Gobierno en la colocación de mil millones de pesos en títulos públicos de anteayer. El funcionario, no obstante, repudió a quienes, desde la city, afirman que es preferible refinanciar los pasivos con el Fondo Monetario antes que colocar papeles más caros, aun cuando en esta operación se paguen costos financieros más elevados. “El que dice eso no sabe de lo que está hablando.” “Creo que hay una visión superficial de los costos y beneficios de las distintas formas de endeudamiento. Con los organismos, el dinero resulta de una negociación que tiene una serie de requisitos muy peculiares”, afirmó Nielsen. El Gobierno cree que habrá un fallo favorable en Estados Unidos y que el canje podrá cerrarse.
En la operación de anteayer, Economía convalidó una tasa de 6,51 puntos más CER, equivalente a una tasa anual de alrededor del 16 a 17 por ciento. “Fue un test ácido de las posibilidades de colocación de deuda”, remarcó Nielsen, en declaraciones radiales, dando cuenta de que la licitación fue una prueba de alto riesgo superada por el Gobierno.
La reacción en la city frente a la primera colocación de deuda desde la devaluación fue dispar. Las acciones líderes registraron una leve caída, del 0,3 por ciento en promedio, aunque acumulan un avance del 7 por ciento en la semana. El dato positivo de la jornada fue que el volumen de negocios volvió a crecer: ayer se transaron papeles por 94,4 millones de pesos. Los bonos, en tanto, registraron una suba promedio del 0,4 por ciento. El Proveedor, con vencimiento en 2012, similar al Boden 2014 lanzado anteayer, registró una mejora del 0,7. El Boden 2014 debutará en la oferta pública el próximo miércoles 18. En el mercado cambiario, el dólar quedó en 2,91 pesos para la venta gracias a que el Banco Central intervino con una compra de 81,2 millones de dólares para sostener la cotización. Las reservas del BCRA superaron los 21 mil millones de dólares. Están exactamente en 21.027 millones.
Tal como informó este diario, los inversores extranjeros hicieron fuertes compras de Boden 2014. “Hubo interés del exterior”, comentó Nielsen. El fenómeno está relacionado con la expectativa de los financistas de que el peso se revaluará frente al dólar en el futuro cercano. Por ese motivo se interesan en comprar activos en pesos ajustados con la inflación y que, además, tienen un rendimiento muy atractivo.
Por último, el secretario de Finanzas se mostró optimista en que habrá un fallo favorable a la Argentina en el Poder Judicial estadounidense, lo que permitiría destrabar el canje. Sin embargo, Nielsen aseguró que desconocía la fecha en que se definirá el tema. En la city presumen que la Corte de Apelaciones de Nueva York se expedirá antes de fin de mes.