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Llenos de bronca e impotencia, con la voz quebrada y al borde del llanto, un puñado de deudores hipotecarios abandonó ayer la Cámara de Diputados donde una vez más el oficialismo frustró la aprobación de una prórroga de los remates de sus viviendas. Por falta de dictamen de comisión, eran necesarios tres cuartos de los votos para habilitar el tratamiento del tema en el recinto. Y a pesar de la posición favorable del duhaldismo y de diputados de Convergencia, además del radicalismo, el ARI y el socialismo, 57 diputados (kirchneristas y de centroderecha) frustraron la posibilidad de frenar los remates por un año. Como la votación fue nominal, pudo saberse que entre ellos estuvieron Osvaldo Nemirovsci, Jorge Argüello, Federico Pinedo y Jorge Vanossi. “El miércoles pasado ya fueron rematadas dos viviendas y si esto no se trata la semana próxima, serán casi un millón las familias afectadas”, se lamentó Marta Martínez con gran indignación. Sin embargo, todo indica que la de ayer fue la última sesión hasta las elecciones.