Media docena de empresas que cotizan en la Bolsa de Comercio destinaron el año pasado 791,8 millones de pesos a la recompra de acciones propias en un contexto de alta volatilidad de precios. De acuerdo con un informe elaborado por el Instituto Argentino de Mercado de Capitales, estas recompras fueron hechas a través de intervenciones directas en el mercado. Las compañías que echaron mano de este recurso para evitar las fuertes fluctuaciones en los valores de sus papeles a merced de la crisis global de los mercados fueron los bancos Macro y Patagonia, la firma de negocios inmobiliarios y agrícolas Cresud. Además, la fábrica de alimentos Molinos y las empresas del sector eléctrico Pampa Energía y Edenor.