ECONOMíA › ROBERTO FELETTI ADVIERTE SOBRE EXIGENCIAS DEL FMI
“Apuntan a la banca pública”
Roberto Feletti, presidente del Banco Ciudad de Buenos Aires, advirtió que los organismos internacionales preparan una nueva ofensiva contra la banca pública. “La presión volvió en medio de las negociaciones por un acuerdo con la Argentina. En la lógica del Fondo Monetario y del Banco Mundial, los bancos públicos no deberían existir”, manifestó Feletti. La ofensiva de Washington se entiende: en lo que va del año, las entidades estatales ganaron mercado a expensas de los privados, en especial de los de origen extranjero.
Desde diciembre, cuando se instauró el corralito, la participación de la banca pública en el universo de depósitos se incrementó casi diez puntos: del 31,9 al 41,3 por ciento del total. En contraposición, la intervención de los extranjeros cayó de 51,1 a 43,7 por ciento, mientras que la de las entidades privadas de capitales locales bajó de 17 a 15 por ciento. Según Feletti, esta dinámica se explica porque “hubo una percepción de que, a diferencia de los extranjeros, los estatales contaban con un prestamista de última instancia; el Estado”.
Frente a esta realidad, el FMI estaría condicionando su visto bueno a la Argentina a un repliegue de la banca pública, en el contexto de una amplia reforma del sistema financiero. “El Fondo quiere que la participación de mercado de los estatales vuelva a los niveles anteriores a la crisis”, apuntó Feletti. Otra de las condicionalidades, según el banquero, radica en que los bancos como el Nación, el Provincia de Buenos Aires o el propio Ciudad dejen de intervenir en los mercados financieros. Es decir, se abstengan de ofrecer nuevos productos a sus clientes, de manera tal de no competir ni formar precios en el mercado bancario.
Para llevar adelante esas reformas, el Fondo está reclamando la intervención de una consultora externa que audite los negocios de los bancos públicos argentinos. Por ejemplo, la cantidad de sucursales y la cantidad de aperturas de cuentas y sus costos. “Si el Gobierno avala la contratación de una consultora daría lugar a una intervención directa en los distintos bancos. Por mi parte, no la voy a aceptar”, señaló tajante. Según explicó Feletti, las entidades financieras públicas ganaron en competitividad y en imagen durante la crisis, ofreciendo mayor seguridad y mejores precios, lo que se constituyó en un golpe certero a los privados, siempre bien dispuestos a sacar buena tajada de cada uno de los negocios que encaran.