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Las protestas por la continuidad del “corralito” que restringe las operaciones financieras y el libre acceso a los depósitos volvieron ayer a hacerse sentir en esta ciudad, con marchas a Plaza de Mayo y manifestaciones en zonas bancarias. Empleados y empresarios del sector de martilleros, de inmobiliarias, escribanías, entre otros, se movilizaron frente a la Casa Rosada, con el objetivo de exigir flexibilizaciones al corralito que les permitan comprar y vender propiedades. La movilización, que arribó a Plaza de Mayo minutos antes de las 17, incluyó a varios centenares de manifestantes, quienes también exigían una reunión con funcionarios del Ministerio de Economía. El presidente de la Federación Inmobiliaria Argentina, Ricardo Alonso, señaló que “si nosotros no vendemos departamentos la industria de la construcción no tiene forma de reactivarse”, y destacó que el sector “está destruido”. El titular de la FIA afirmó que “hay empresas o inmobiliarias que ya no aguantan más, porque prácticamente estamos parados desde noviembre”. A la parálisis inmobiliaria, se unen otros inconvenientes, aseguró Alonso, como “qué pasa con la gente que compró en construcción, en cuotas, y ahora tiene que afrontar la escritura y no le dan la hipoteca”. “Pedimos, que se libere el corralito y se normalice la situación” y, hasta llegar a esa etapa, llevar la restricción de la disposición de los ahorros a “como estaba al principio”, dijo Alonso.