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Frente al actor Nito Artaza, el presidente del Banco Central fue terminante: un eventual fallo de la Corte en contra de la pesificación no desembocaría en un caos. Según Artaza, Pignanelli le confesó que el fallo terminaría con la actual incertidumbre. Ambos mantuvieron un encuentro ayer en la sede del BCRA para evaluar la situación. La posición de Pignanelli dista de la de los banqueros. Para los financistas, la determinación judicial podría ser muy problemática.
El mensaje tranquilizador de Pignanelli a Artaza fue incluso contradictorio con el manifestado por Alejandro Henke, economista jefe de la entidad monetaria. Para este experto, “la redolarización puede ser correcta y, en el fondo, quizás una medida reparadora para mucha gente. Pero según cual sea el fallo de la Corte, el impacto puede ser caótico”, señaló. Seguramente, Henke se refirió a la posibilidad de que la Justicia obligue a una devolución urgente de los ahorros acorralados, unos 16.000 millones de pesos más el acumulado del CER. El Banco Central está a favor de la entrega de un bono compulsivo a los ahorristas estafados, una alternativa descartada por Economía.
En la misma línea que el economista jefe del BC se expresó Miguel Kiguel, presidente del Banco Hipotecario: “la redolarización de depósitos podría ayudar a recomponer la seguridad jurídica del país. Pero hay que ver –relativizó Kiguel– si por preservar ese aspecto no se genera un daño macroeconómico mucho mayor. Es abrir una caja de Pandora y se hace difícil imaginarse qué puede salir de todo eso”.
También fue terminante la posición del Central frente a la decisión que vaya a tomar los supremos. “Así como no le gusta al BCRA que no respeten nuestra independencia, a nosotros tampoco nos gustaría violar la independencia de la Corte Suprema”, sentenció Henke.
La posición del BCRA respecto del futuro fallo reabrió la pulseada entre Pignanelli y Lavagna. Frente a la postura de que sea el Estado el encargado de hacerse cargo de la redolarización, en Economía pretenden una salida menos parcial, iniciándose con una negociación entre banqueros y ahorristas.