El cierre del IV Foro Social de las Américas, que se dio cita en Asunción, coincidió con la celebración de dos años de gobierno del ex obispo de San Pedro, Fernando Lugo. Secundado por sus pares Evo Morales de Bolivia y José “Pepe” Mujica de Uruguay, el presidente paraguayo anunció su disposición a industrializar la soja.

Con sus invitados internacionales, el mandatario coincidió en avanzar en el bloque llamado Urupabol. Los tres líderes ratificaron su voluntad de integración energética, primero en un encuentro entre ellos, y luego se trasladaron a la sede del Foro Social de las Américas, en la capital paraguaya. Lugo, quien llegó al poder el 15 de agosto de 2008 rompiendo con 61 años de hegemonía del Partido Colorado, hizo un llamado a fortalecer la integración de América latina. “Este Foro y los anteriores son el reflejo de los nuevos vientos que soplan en nuestro continente, y de los profundos cambios que estamos viendo hoy. El proceso de recuperación de la soberanía es la única garantía de que el proceso de integración se va a desarrollar en beneficio de los pueblos.”

Antes del acto de cierre, Lugo afirmó en un mensaje al país que su gobierno se dispone a industrializar la soja, cuya producción a escala es rechazada y resistida por los sectores de izquierda del Ejecutivo. “El Paraguay es uno de los grandes productores de alimentos. En el ranking mundial ocupamos el privilegiado sitio de los mayores productores de soja, lo cual es un logro extraordinario”, señaló. El país es cuarto exportador mundial de soja, su principal fuente de ingreso de divisas, lo que explica que en el primer semestre de 2010 haya crecido por encima del 13 por ciento, según datos del sector.

La conmemoración de los dos años en el poder lo encontraron a Lugo luchando por salir de una enfermedad. El mandatario paraguayo, de 59 años, regresó anteayer de Brasil tras permanecer hospitalizado durante cuatro días en un hospital de San Pablo, donde se sometió a una serie de pruebas y realizó la primera sesión de quimioterapia contra un linfoma detectado en la ingle, el mediastino (tórax) y la columna vertebral.

La visita de Morales y Mujica puede leerse como el apoyo a su vecino en un momento difícil. En su discurso ante los activistas sociales en el cierre del Foro, Morales destacó que Bolivia “está mejor” luego de la nacionalización de los recursos naturales (hidrocarburos) y que en la época de los gobiernos neoliberales “siempre había déficit” en las arcas del Estado.

Morales exhortó, asimismo, a hacer un frente de lucha contra el capitalismo con un plan que contemple posiciones claras de los países de América latina frente al calentamiento global, cuyas secuelas achaca a los países desarrollados. “Los pueblos unidos y organizados somos mucho más fuertes que cualquier Estado”, subrayó el líder aymara, quien viajó a Asunción con un día de retraso en medio de unas protestas en Potosí (ver página 18), en el sudoeste de Bolivia, que tiene paralizado a ese departamento.

Cuando le tocó el turno, el presidente de Uruguay, José Mujica, cuestionó el modelo económico impuesto por la “civilización occidental y agresiva que ha definido la forma de democracia que cree es la única posible en el mundo”. Mujica consideró, ante unas 2 mil personas congregadas en un polideportivo de las afueras de Asunción, “que no hay un modelo, la lucha es por múltiples modelos porque hay múltiples pueblos (...), la verdadera lucha es aprender a convivir sin agredir a los demás”, dijo el ex guerrillero tupamaro. Mujica cumplirá hoy su segunda jornada de su primera visita de Estado a Paraguay.

Como Lugo, Morales y Mujica coincidieron en avanzar en el bloque Urupabol. El presidente uruguayo ratificó la voluntad de su país de ceder un puerto de aguas profundas para Paraguay, informó ayer la cadena de noticias Telesur. También hablaron del proyecto del Gasoducto del Sur, que incluye a la Argentina.