Mientras el régimen de Muammar Khadafi bombardeó por segundo día consecutivo al pueblo de Brega, el resto del mundo comenzó a presionar con más fuerza sobre la situación en el país nordafricano. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, le exigió al líder libio que abandone el poder y reiteró que el país que preside está listo para actuar inmediatamente: “Será una decisión que tomaremos junto con la comunidad internacional”. Sin embargo, ese surtido de países seguro no contempla la participación de Venezuela. O, por lo menos, no en la mente de Obama, quien descartó sin titubear la propuesta del presidente bolivariano, Hugo Chávez, de enviar una comisión mediadora para intentar solucionar el conflicto entre Khadafi y quienes no desean más que el fin de su régimen.

“Muammar Khadafi perdió legitimidad para dirigir y debe irse”, sostuvo Obama en una conferencia de prensa que ofreció junto con su par mexicano, Felipe Calderón. “Eso es lo que debe hacer”, subrayó. Asimismo, el mandatario estadounidense advirtió a los funcionarios cercanos al obstinado líder que sus acciones son vigiladas y que la comunidad internacional no tolerará ataques contra civiles. “Deben saber que la historia se está moviendo en contra del coronel Khadafi y que ellos deberán responder por sus crímenes. Su apoyo a él y su disposición a llevar a cabo órdenes que dirigen violencia contra ciudadanos es algo por lo que, al final, serán responsabilizados.”

Estados Unidos mantiene vigentes todas las opciones disponibles, incluyendo la militar, para responder a la crisis, indicó Obama. Sin embargo, enfatizó que actualmente el foco se mantiene sobre la situación humanitaria. En ese sentido, dijo que equipos de ayuda estadounidenses fueron enviados para colaborar con las Naciones Unidas y con otras organizaciones internacionales en temas humanitarios, y que hay preparativos para enviar alimentos.

Con respecto al conflicto político fronteras adentro de Libia, el mandatario no descartó como opción el establecimiento de una zona de exclusión de vuelo sobre el país para proteger a los civiles de los ataques de aviones del gobierno. Sin embargo, prometió que toda respuesta será coordinada a nivel mundial. “Quiero que tomemos nuestras decisiones en base a lo que será lo mejor para el pueblo libio en consulta con la comunidad internacional”, especificó.

Por otro lado, el vocero del departamento de Estado de Estados Unidos, Philip Crowley, descartó la propuesta de mediación de Venezuela para ayudar a poner fin a la violencia en Libia. “No se necesita que una comisión internacional le diga al coronel Khadafi lo que tiene que hacer por el bien de su país y la seguridad de su pueblo”, expresó.

Los cancilleres de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA) discutirán hoy en Venezuela la propuesta de Chávez de crear una misión internacional de paz para intentar mediar en la creciente violencia en Libia y evitar una guerra civil. “Nosotros vamos a tener mañana (por hoy) una reunión de consultas políticas de los cancilleres del ALBA en Venezuela, de tal manera que con seguridad vamos a comentar sobre eso”, apuntó ayer el canciller de Ecuador, Ricardo Patiño. Además de Venezuela y Ecuador, el ALBA está integrado por Bolivia, Cuba, Nicaragua, Antigua y Barbuda, Dominica, y San Vicente y las Granadinas.

El ministro venezolano de Información, Andrés Izarra, fue quien ayer informó que tanto el gobierno libio como la Liga Arabe estaban interesados en la propuesta de Chávez, y que la cita ministerial del ALBA sería el 11 de marzo en la capital ecuatoriana. Sin embargo, ese encuentro se adelantó para hoy. No obstante, la oposición venezolana rechazó la iniciativa bolivariana.

El martes, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, había considerado de manera positiva el planteamiento de su aliado venezolano. Ayer, en una nueva intervención ante los medios locales, Correa calificó de “inaceptable” una incursión armada a Libia, quien recordó que tiene grandes riquezas petroleras.

“A nosotros nos parece importante poder constatar, confirmar qué es lo que efectivamente está pasando en Libia y alguna iniciativa que pueda contribuir a la tranquilidad, a la solución de problemas tan importantes que estamos conociendo a través de los medios”, subrayó por su parte Patiño. El funcionario puso sobre la mesa las amplias diferencias que existen entre la información difundida por los medios de comunicación internacionales que se encuentran en Libia y los datos que Khadafi difundió en las tres conferencias de prensa que ofreció desde que comenzaron las revueltas en su contra.