Al menos 39 personas resultaron heridas ayer cuando un banco de Gansu, en la región noroeste de China, fue atacado con bombas molotov, informaron medios locales. La agencia estatal Xinhua indicó que seis personas se encuentran en estado de gravedad.

Aún se desconoce si el ataque causó víctimas fatales. Previamente la agencia había citado declaraciones de testigos según los que el ataque dejó “decenas de muertos”, pero la información no fue confirmada por fuentes oficiales. El explosivo fue arrojado en momentos en los que empleados del banco mantenían una reunión interna, dijeron testigos.

La sede atacada se encuentra en la ciudad de Vuvei, en el distrito tibetano de Tianzhu. Según un informe no confirmado de un periodista local, el ataque fue lanzado por un ex empleado del banco que fue despedido por sustracción de fondos. Un vocero policial describió el ataque como “una venganza”. Los testigos citados por Xinhua relataron que más de diez personas se lanzaron desde el tercer piso en el que se realizaba la reunión al entrar en pánico por la explosión.