Miles de colombianos expresaron su apoyo en las calles de Bogotá y otras ciudades al proceso de paz del gobierno con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el fin del conflicto armado. La de ayer fue la convocatoria más plural, contó con la presencia del presidente Juan Manuel Santos, ex guerrilleros y grupos de izquierda. Los únicos ausentes en la marcha, apoyada por las FARC, fueron los sectores más ultraconservadores, que ven la opción militar como la única salida al largo conflicto armado que vive Colombia, y algunos opositores al gobierno, que la consideran como un acto electoral de Santos. Según el diario El Tiempo, de Bogotá, al menos 30 mil personas se concentraron por la tarde en la plaza Bolívar de Bogotá.

Policías, soldados, víctimas del conflicto armado, defensores de los derechos humanos y políticos enterraron diferencias cosechadas durante décadas para unir sus voces en un día soleado en la capital colombiana. Ríos de camisetas blancas recorrieron las calles con pancartas que clamaban por la paz y respaldaban las negociaciones que el gobierno y la guerrilla más antigua del continente iniciaron en noviembre en La Habana. En la jornada de ayer se unieron en tiempo, espacio y propósitos sectores dispares de la vida política colombiana.

En un tramo de la avenida de El Dorado, poco antes de llegar al Centro de Memoria Histórica, el presidente Santos, su esposa, María Clemencia Rodríguez, y miembros del oficialista Partido de la U coreaban: “Uh, ah, por la paz, Santos es capaz”. A unos metros, sólo separados por los escoltas, jóvenes de la izquierdista Marcha Patriótica, liderada por la ex senadora liberal Piedad Córdoba, invocaban al Libertador Simón Bolívar y clamaban por la paz, pero con justicia social e igualdad.

La mayor convocatoria que había congregado a los colombianos alrededor de una misma causa tuvo lugar el 4 de febrero de 2008, cuando desde varias ciudades del país y del mundo protestaron contra los secuestros de las FARC, marcha en la que la izquierda no participó. Algunos militantes del opositor Polo Democrático Alternativo (PDA) se abstuvieron de participar por considerar que el presidente Santos utiliza esta iniciativa para promover su eventual reelección en 2014. Tampoco asistieron integrantes del movimiento Puro Centro Democrático, que lidera el ex presidente Alvaro Uribe, quien expresó su tajante rechazo a la movilización.Uno de los integrantes de este grupo, Francisco Santos, ex vicepresidente y primo del actual mandatario, dijo en declaraciones a RCN Radio que este acto alienta a la impunidad y a la legitimación de la guerrilla: “Soy escéptico, qué le voy a hacer”, afirmó. En general, los colombianos de todos los estratos sociales e ideologías salieron a las calles. “Aquí hay un gentío, un río de gente”, describió a su paso por la capital colombiana la ex senadora Córdoba, una de las organizadoras desde la Junta de Marcha Patriótica, junto con el gobierno nacional y la Alcaldía de Bogotá. Córdoba agregó: “La paz no tiene reversa, la paz está en marcha por las calles del país, por las calles de Bogotá”.

Además, las FARC confirmaron la llegada a La Habana de otros dos nuevos guerrilleros que se incorporarán a su equipo en los diálogos de paz con el gobierno colombiano. “Arribaron ayer (por el lunes) a las 17.30 al aeropuerto José Martí, Laura Villa y Sergio Ibáñez, combatientes del Bloque Comandante Jorge Briceño, como refuerzo a la Delegación de Paz de las FARC-EP en La Habana, Cuba”, indicaron en una nota divulgada en el blog del equipo negociador de la guerrilla con fecha de ayer. Estos dos insurgentes se suman a los otros cuatro que arribaron el sábado: Pablo Catatumbo, Jorge Torres Victoria, comandante del Bloque Occidental; Victoria Sandino Palmera, Freddy González y Lucas Carvajal.

La información indica que los guerrilleros fueron extraídos de una extensa zona montañosa de la Macarena y trasladados al aeropuerto de San José del Guaviare, desde donde viajaron a La Habana, con escala en San Andrés. Asimismo, la fiscalía colombiana levantó 51 órdenes de captura que pesaban sobre los seis guerrilleros de las FARC que salieron en los últimos días del país andino para incorporarse al equipo negociador en los diálogos de paz en La Habana. El fiscal general colombiano, Eduardo Montealegre, informó ayer a periodistas sobre la medida, que según especificó se tomó “mientras ellos (los nuevos negociadores) se encuentran en La Habana”.

El Ejército de Liberación Nacional (ELN) llamó a los colombianos a unirse en una voz única por la esperanza y la paz, en todo el territorio. “Desde el Putumayo a La Guajira, desde el Pacífico chocoano hasta el límite de Colombia con Brasil”, señaló un comunicado firmado por el comandante Nicolás Rodríguez