El gobierno del primer ministro paquistaní Nawaz Sharif (foto) ordenó un masivo ataque contra un aérea tribal controlada por los talibán en la frontera con Afganistán, que dejó al menos 50 muertos, una semana después de que un grupo jihadista atacara uno de los principales aeropuertos del país y dejara 38 víctimas. Los ataques comenzaron a primera hora de la madrugada de ayer sobre las zonas de Degan y Datta, en la región conocida como Waziristán del Norte, a apenas unos kilómetros de la frontera con Afganistán, según informó el ejército de Pakistán. La ofensiva militar se concentró en esa área porque el gobierno cree que allí se esconden milicianos paquistaníes y extranjeros vinculados con el ataque del domingo pasado contra el aeropuerto internacional de la ciudad de Karachi. Entre el medio centenar de insurgentes que, según Islamabad, murieron, se encontraría Abu Abdul Rehman al Maani, el hombre señalado por el gobierno nacional como el cerebro detrás del ataque contra el aeropuerto de Karachi. Al Maani es miembro del Movimiento Islámico de Uzbekistán, el grupo islamista que asumió la responsabilidad del ataque de una semana atrás.