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Las autoridades israelíes revelaron ayer un nuevo plan para ampliar un asentamiento judío en Cisjordania, en un gesto más de su determinación de continuar la colonización, pese al riesgo de que sus proyectos molesten a su aliado estadounidense. El ministro israelí de Defensa, Shaul Mofaz, dio luz verde a la construcción de 300 viviendas adicionales en Ariel, una de las colonias más grandes de Cisjordania, informó una fuente oficial.
Estos proyectos se inscriben dentro de la política del primer ministro israelí, Ariel Sharon, que prevé reforzar los bloques de colonización en Cisjordania y al tiempo evacuar cuatro asentamientos aislados en ese territorio y todos los de la Franja de Gaza. “El ministro Mofaz aprobó hace seis meses la construcción de 300 viviendas suplementarias”, de las 2000 previstas en un plan de desarrollo de la ciudad, indicó un alto funcionario que pidió el anonimato. El pasado 2 de agosto, el gobierno israelí fue duramente criticado por Washington tras aprobar oficialmente la construcción de 600 viviendas adicionales en la colonia urbana de Maalé Adumim, cerca de Jerusalén.