EL MUNDO › EL CANDIDATO OPOSITOR ARREMETIO CONTRA EL REDESPLIEGUE DE TROPAS POR BUSH
Empezó la guerra del teniente Kerry
El candidato demócrata John Kerry, ex teniente de Marina en Vietnam y rival de George W. Bush en noviembre, criticó su plan de retirada de 70 mil soldados estadounidenses de Asia y Europa por diez años. Para Kerry, perjudica la seguridad de Estados Unidos y su lucha contra oel terrorismo.
El plan que Bush anunció a principio de semana de retirada de tropas de Asia y Europa ya es blanco de campaña. El candidato demócrata a la Casa Blanca, John Kerry, lo criticó porque “perjudicará la seguridad de Estados Unidos y dificultará la guerra contra el terrorismo”. Kerry, destacó que la propuesta del actual gobierno “no refuerza nuestra posición en la guerra contra el terrorismo” ya que, “con Al Qaida operando en 60 países, necesitamos alianzas más estrechas en todas las partes del mundo”, en lugar de retirar tropas de países aliados.
“Este no es el momento y ésta no es la forma” de retirar fuerzas de la escena internacional, afirmó Kerry en un discurso ante la convención anual de la organización de veteranos de guerra (VFW), en Cincinnati, Ohio. Kerry centró su ataque en la retirada de la península coreana, en un momento en el que el gobierno de Corea del Norte mantiene el desafío a la comunidad internacional con la continuación de su programa nuclear militar. El objetivo “vagamente expuesto” por Bush el lunes en esta misma convención “genera más dudas que respuestas sobre nuestras intenciones y nuestros compromisos” en la seguridad mundial, aseguró el candidato demócrata. El plan de Bush incluye la retirada de entre 60.000 y 70.000 soldados de Europa y Asia en el curso de los próximos diez años. Los puntos más destacados son la retirada de aproximadamente un tercio de los 37.000 soldados estadounidenses de Corea del Sur y de dos divisiones pesadas del ejército actualmente estacionadas en Alemania. Ayer, el canciller alemán, Gerhard Schroeder, dio por bueno el repliegue de cerca de 30 mil soldados norteamericanos de su país.
“¿Por qué estamos retirando 12.000 soldados de la península coreana a la vez que negociamos con Pyongyang, un país que tiene armas nucleares?”, preguntó el rival de Bush. La retirada parcial de Corea “envía la señal equivocada en un momento equivocado” al régimen norcoreano, insistió. A su vez, el ex general Wesley Clark –que fue jefe militar de la OTAN de 1997 al año 2000 y que intentó sin éxito ser el candidato demócrata para las presidenciales de noviembre– apoyó la opinión de Kerry al decir que el plan de Bush “es un error estratégico porque es pura política”. Según Clark, entra en contradicción con el análisis que el propio gobierno hace: “Es cierto que estamos en guerra, porque Al Qaida nos amenaza a todos”.
Kerry repitió su propuesta de aumentar las filas del ejército en 40.000 soldados para poder afrontar las crecientes misiones en el exterior y consideró que el plan de Bush no resolverá a corto plazo la excesiva dispersión de las fuerzas de tierra por todo el mundo. En este sentido, insistió en que EE.UU. debe intentar cooperar más a fondo con los aliados, sobre todo con los de la OTAN, para reducir el esfuerzo militar y económico de Washington en Irak, donde “estamos cargando con la parte del león” en la estabilización y reconstrucción del país. También pidió que se acelere la formación de las fuerzas militares y de policía de Irak para que los ciudadanos de ese país asuman más rápidamente mayores funciones en la seguridad iraquí.
En el plano doméstico, Kerry, quien combatió en la guerra de Vietnam y recibió cuatro condecoraciones, acusó también a Bush y a su gobierno de haber adoptado numerosas medidas que han perjudicado a los veteranos militares. Cierre de hospitales, aumento de los costos de las medicinas para los ex militares y exclusión de veteranos de algunos servicios de salud fueron algunas de las medidas que denunció el candidato demócrata.
“Los 26 millones de veteranos y sus familias están muy lejos de poder proclamar que la misión está cumplida”, afirmó Kerry, en una alusión a la frase que Bush anunció el lunes acerca de la puesta en marcha de nuevos programas de salud para los ex militares.
La intervención de Kerry continuó con el intento de las dos campañas presidenciales de ganarse el voto de los antiguos militares de EE.UU., donde hay 26,4 millones de personas que han servido en las fuerzas armadas y son votantes potenciales. Tradicionalmente, los ex militares suelen tender hacia posiciones políticas conservadoras, pero Kerry está apostandoa fondo por su experiencia militar para lograr el apoyo de numerosos veteranos.