EL MUNDO › DENUNCIAN UNA CONSCRIPCION ENCUBIERTA EN EL EJERCITO
Cómo procesar al Pentágono
Por Andrew Gumbel *
Desde Los Angeles
Un veterano estadounidense condecorado de San Francisco se convirtió en el primer reservista del ejército que demanda a la administración Bush por su política de ordenar a los soldados a seguir sirviendo en Irak más allá de los términos acordados cuando se enrolaron. Los abogados del soldado, identificado sólo como John Doe para proteger su privacidad, dijeron que la política del ejército llamada “stop-loss” (parar la pérdida) “era arbitraria, injusta y no autorizada por la ley”. Por ahora, hay sólo un acusado involucrado. Pero el caso abarca uno de los puntos más sensibles de esta campaña presidencial.
El presidente Bush está siendo muy criticado por una política denunciada por sus detractores como una forma de conscripción encubierta. A los críticos conservadores de su política de Irak, mientras tanto, les preocupa que el ejército se ha sobreextendido más de lo que puede abarcar en Irak y no podría manejar otra crisis mayor si ésta surgiera. John Kerry, el competidor del Partido Demócrata de Bush, propuso incrementar la fuerza total de las fuerzas armadas de Estados Unidos en unas 40.000 tropas, de manera que los que actualmente están en Irak puedan regresar a sus hogares a tiempo.
Varios diarios de Estados Unidos comenzaron a publicar historias sobre los reservistas que no pueden mantener sus trabajos civiles a causa de sus largas ausencias, a pesar de que la política oficial obliga a los empleadores a mantener sus puestos disponibles durante cinco años, y a entrevistar a los miembros de las familias que no saben cuándo regresarán sus seres queridos de una ya polémica aventura militar.
Según los principales abogados en el nuevo caso, John Doe, un sargento, tiene notables antecedentes militares adquiridos en más de nueve años de servicio activo. Participó en la invasión del año pasado de Irak y actualmente está enrolado en la guardia nacional terrestre de California, que expira en diciembre. La conscripción encubierta podría obligarlo a dejar a su mujer y dos hijas y regresar a Irak durante dos años más. Su abogado, Michael Sorgen, sostuvo en su declaración que la política de “stop loss” estaba basada en una orden ejecutiva emitida por el presidente Bush tres días después de los ataques del 11 de septiembre en Nueva York y Washington. La orden, sin embargo, se refería a prevenir futuros ataques terroristas contra Estados Unidos. “El ex régimen iraquí fue removido del poder e Irak no puede ser considerado ahora como una amenaza de terrorismo contra Estados Unidos, si alguna vez lo fue”, escribió Sorgen. “La orden de ‘stop-loss’, por lo tanto, no es válida.”
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère.