EL MUNDO
Cuando el mejor aliado se borra
Tras el secuestro de Margaret Hassan, Care International suspendió sus actividades en Irak. Blair, acosado por su Parlamento.
Por Walter Oppenheimer*
Desde Londres
La organización humanitaria Care International ha suspendido su actividad en Bagdad tras el secuestro de su responsable en Irak, Margaret Hassan. La decisión supone un contratiempo para el gobierno iraquí y la coalición porque puede ser un mal ejemplo para otras ONG presentes en el país, aunque Care ha decidido mantener a sus empleados en Irak. En Londres, casi medio centenar de diputados ha exigido a Tony Blair que sea el Parlamento quien tenga la última palabra sobre el desplazamiento de tropas británicas a la zona de Bagdad. Blair dijo ayer que es falso que ya hubiera tomado una decisión al respecto y negó la acusación de que esté prestando ayuda electoral al presidente Bush.
“Nuestros empleados no están operando en estos momentos allí en Irak”, declaró a la cadena de radio Australian Broadcasting Corporation el jefe ejecutivo de Care Australia, Robert Glasser, que coordina las actividades de Care International en Irak. “Desde luego, ahora mismo no están trabajando, a la luz de la actual situación”, dijo. Glasser explicó que las operaciones de la organización se habían suspendido debido al secuestro de Margaret Hassan, pero aclaró que en estos momentos no hay planes para evacuar al personal de Irak. No está claro cuántos no iraquíes trabajan con Care en Irak.
En una entrevista con BBC Radio 5 Live, un alto cargo iraquí lamentó la decisión de Care. “El pueblo iraquí los necesita horrores y si se marchan estarán haciendo exactamente lo que quieren esos terroristas y criminales”, declaró Muffawaq Al Rubaiye, asesor de Seguridad Nacional del gobierno provisional iraquí. El marido de Margaret, Tahseen Ali Hassan, hizo un llamamiento para que liberaran a su mujer, secuestrada a primera hora de la mañana del lunes por unos desconocidos, y explicó que nunca había recibido amenazas. Nacida en Irlanda según fuentes irlandesas y en el Reino Unido según los británicos, Margaret Hassan lleva 30 años en Irak dedicada a tareas humanitarias, los últimos 10 en Care. “Nunca había pasado nada parecido antes, porque Care es una organización humanitaria que lleva 30 años sirviendo al pueblo iraquí”, declaró el señor Hassan a la televisión árabe Al Jazeera.
En Londres, el primer ministro Tony Blair se comprometió en el Parlamento a hacer todo lo posible para liberar a Margaret Hassan. En la habitual sesión de control de los miércoles, Blair aseguró que la decisión de desplazar tropas británicas desde Basora hasta la periferia de Bagdad “aún no está tomada”, desmintiendo las informaciones de prensa de que la decisión se tomó la semana pasada, antes de que se filtrara al público que Estados Unidos había pedido tropas británicas para relevar a sus marines y destinar éstos a la toma de la ciudad rebelde de Faluja. Asimismo dijo que el traslado de soldados “no tiene que ver con las elecciones en EE.UU.”.
Blair insistió en que todo depende de lo que digan los militares británicos y que piensa seguir el dictamen de éstos, rechazando así por pasiva la petición de una cincuentena de diputados, incluido el líder de los Liberales Demócratas, Charles Kennedy, de que sean los comunes quienes tomen la decisión. Los tories también se oponen a que el asunto se vote en el Parlamento para no verse obligados a elegir entre dos males: apoyar al gobierno laborista o desairar a Estados Unidos.
* De El País de Madrid. Especial para Página/12.