EL MUNDO › EL LIDER PALESTINO MAHMUD ABBAS SE REUNIO CON BUSH
Agenda abierta en Medio Oriente
Por José Manuel Calvo *
Desde Washington
George W. Bush dijo ayer al presidente Mahmud Abbas, con el que mantuvo una entrevista de una hora, que los palestinos “están más cerca de conseguir sus aspiraciones” y lo animó a “ganarse la confianza de sus vecinos rechazando el terrorismo y luchando contra él”. Abbas reclamó el levantamiento de las “duras y humillantes” restricciones de movimientos en Cisjordania, y el presidente estadounidense pidió a Israel no actuar en contra de “sus obligaciones en el proceso de paz”.
Bush, que no quiso contestar las preguntas relacionadas con sus apuros más inmediatos –el posible procesamiento de asesores de la Casa Blanca por filtraciones, la complicada situación del vicepresidente Cheney en el mismo caso, el desconcierto conservador ante la candidatura de Harriet Miers para el Supremo–, aplicó su habitual y no siempre bien fundado optimismo al conflicto entre israelíes y palestinos y dijo que tiene “un montón más de confianza” en las posibilidades de paz que cuando llegó al poder, aunque reconoció que “las viejas rencillas no se resuelven de la noche a la mañana”. ¿Habrá un Estado palestino antes de que él deje la Casa Blanca, en 2008? “Me gustaría ver los dos Estados; si eso ocurre antes de que me vaya, estaré allí para ser testigo de la ceremonia. Si no, trabajaremos para sentar las bases y que el proceso sea irreversible.” Bush y Abbas, dos hombres en busca de credibilidad, parecieron entenderse. El presidente estadounidense no ahorró elogios para con el palestino, “un hombre consagrado a la paz y a la aspiración de su pueblo de tener un Estado propio”, pero también le envió un mensaje sobre la necesidad de frenar la violencia y dijo que sobre el futuro pesa “la amenaza que suponen las bandas armadas para la creación de una Palestina democrática”. Abbas, que se mueve en territorio delicado –en contra del terrorismo pero obligado a defender la participación electoral de los fundamentalistas de Hamas–, dijo que se tomaron “medidas para asegurar el imperio de la ley y el orden público y prohibir las manifestaciones armadas” y prometió que las elecciones parlamentarias de enero contribuirán a extender la ley en los territorios. Bush aseguró que Abbas y el primer ministro israelí, Ariel Sharon, están comprometidos con la paz, celebró la retirada de Gaza y de una pequeña parte de Cisjordania y se refirió a las obligaciones israelíes sobre asentamientos incluidas en la Hoja de Ruta, proceso que respaldan EE.UU., la UE, Rusia y la ONU. “Esto significa que Israel tiene que eliminar los controles no autorizados y detener la expansión de los asentamientos; también que la barrera que se está construyendo para proteger a Israel de los atentados terroristas debe ser una barrera de seguridad, no política.”
* De El País de Madrid. Especial para Página/12.