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Después del debate televisivo de la semana pasada, la socialista Michelle Bachelet podría sufrir una merma de votos a manos del candidato de la coalición de izquierda, Tomás Hirsch, forzando una segunda vuelta con alguno de los dos rivales de derecha, más probablemente con el empresario Sebastián Piñera, según un sondeo publicado ayer por el diario chileno La Tercera. Sin embargo, en el caso de un ballottage, Bachelet se impondría cómodamente.
La opinión general es que Hirsch fue el gran ganador del debate del miércoles pasado, ya que antes no lograba superar el 2 por ciento y ahora habría trepado hasta un 5,2 por ciento de intención de voto, según el sondeo de la empresa Feedback. El candidato de la coalición entre humanistas y comunistas busca alcanzar los dos dígitos que, según los analistas locales, conseguiría a costa de la candidata oficial, forzando así una segunda vuelta que se realizaría el 15 de enero próximo.
Un senador socialista y miembro del comando de Bachelet admitió que Hirsch es un tema de “preocupación” y que forzará una segunda vuelta si saca más del 5 por ciento. Según la encuesta de La Tercera, si el rival fuera Joaquín Lavín, de la Unión Demócrata Independiente, la ex ministra de Defensa y de Salud de Lagos se impondría con el 58,6 por ciento contra un 31,7 por ciento. En cambio, si fuera Piñera ganaría con el 53,1 por ciento contra un 37,8 por ciento.
Hirsch es un empresario de 49 años que tenía escasa cobertura de prensa y el debate televisivo fue una gran oportunidad para explicar sus ideas. Ahora quedó perfilado como un candidato con influencia para incidir en el resultado del 11 de diciembre. El otro que avanzó posiciones con el debate fue Piñera, alcanzando una intención de voto de 19,4 por ciento y superando a Lavín, con el que compite por el electorado más conservador. Una eventual segunda vuelta puede definirse con el segundo y último debate, que se realizará esta semana, y los cuatro candidatos lo saben.