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Al fin se confirmó. Nuevos documentos desclasificados revelan los “amplios esfuerzos” de la Administración Nixon para prevenir la victoria de la coalición de izquierdas Frente Amplio de Uruguay en las elecciones presidenciales y legislativas de 1971. El Proyecto de Documentación del Cono Sur del Archivo Nacional de Seguridad, una organización no gubernamental que funciona en la órbita de la Universidad George Washington, publicó en Internet 15 documentos de la era Nixon que tienen relación con el presunto fraude de 1971 en Uruguay.
Un documento recientemente desclasificado de la colección Nixon en el Archivo Nacional de Estados Unidos reveló que durante una reunión con el entonces primer ministro británico, Edward Heath, el presidente Nixon admitió que “Brasil ayudó a manipular las elecciones uruguayas” en 1971. “El presidente Nixon sabía perfectamente de qué estaba hablando, pues acababa de reunirse con el presidente brasileño dos semanas antes en Washington”, dijo Carlos Osorio, director del Proyecto de Documentación del Cono Sur. Los documentos desclasificados muestran que Estados Unidos estaba profundamente preocupado que el ejemplo del presidente socialista de Chile, Salvador Allende, se repitiera en Uruguay. También prueban que la Embajada de Estados Unidos en Montevideo recomendó actividades abiertas y encubiertas para contrarrestar el peso que adquirían las publicaciones del Frente Amplio, y que promovió la cooperación entre Brasil y Argentina para apoyar operaciones en Uruguay. Estas preocupaciones eran compartidas por Brasil y Argentina, cuyas agencias de inteligencia militar llevaban a cabo consultas regularmente y habían llegado a un acuerdo para intervenir en los eventos políticos en Uruguay.
Tras las elecciones uruguayas de 1971, en las que se declaró ganador al candidato presidencial del conservador Partido Colorado, Juan María Bordaberry, hubo denuncias de que se encontraron urnas llenas de votos y sin abrir en terrenos baldíos y arroyos. El Partido Nacional, tradicionalmente conservador pero que en esa ocasión llevaba como candidato a la presidencia al progresista Wilson Ferreira Aldunate, denunció graves irregularidades en el desarrollo del escrutinio, como la desaparición de 38 urnas en Montevideo. Ferreira denunció la existencia de “más votos que votantes” y acusó a la Corte Electoral de actuar como “comité político del Partido Colorado”, pero el 14 de febrero de 1972 la Corte Electoral desestimó el reclamo y proclamó a Bordaberry como presidente.
Con el nuevo gobierno colorado se llevó adelante una represión en el marco de su combate al grupo armado Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, utilizando la tortura contra sus miembros y contra los militantes de muchas otras organizaciones de izquierda, sindicales y estudiantiles, y provocando la muerte de activistas políticos y sociales. En 1972, los Tupamaros fueron derrotados y su dirigencia encarcelada, y en junio de 1973 el presidente disolvió el Poder Legislativo, dando inicio a una dictadura militar que gobernó el país con mano dura hasta 1985. “Las operaciones encubiertas de la CIA para prevenir y luego desestabilizar al gobierno de Allende en Chile son ampliamente conocidas. Sólo recientemente, sin embargo, ha sido posible documentar cómo el gobierno de Estados Unidos intentó detener la victoria electoral del Frente Amplio”, dijo Osorio.
Los documentos desclasificados están en Internet en inglés en la siguiente dirección: http://www.n
sarchive.org/NSAEBB/NSAEBB71. Enlace en español: http://
www.nsarchive.org/NSAEBB/NSAEBB71/indexesp.html.