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Fue el punto final a la carrera política de Augusto Pinochet: el propio ex dictador chileno renunció ayer a su cargo de senador vitalicio tres días después que la Corte Suprema lo liberase del juicio que enfrentaba por el caso Caravana de la muerte, sobreseído definitivo en calidad de demente “incurable”. Pinochet formalizó su dimisión en una carta dirigida al presidente del Senado, Andrés Zaldívar, remitida a través del cardenal arzobispo de Santiago, Francisco Javier Errázuriz. El gobierno de Ricardo Lagos calificó de “coherente” la decisión de Pinochet y que dará “tranquilidad” a los chilenos, en el deseo que “el pasado quede en el pasado y demos vuelta la página amarga de nuestra historia”, apuntado por Heraldo Muñoz, secretario general de la gestión Lagos. La renuncia entrará en vigor formal el próximo martes en el Senado y Pinochet adquiere el nuevo fuero de “ex presidente de la República”, por el cual también es inmune a las persecuciones judiciales.
La dimisión a senador estaba latente desde que este lunes la Corte Suprema eximiera a Pinochet del juicio en el caso de la Caravana de la Muerte, en el que estaba procesado como encubridor de 57 homicidios y 18 secuestros calificados, “por padecer una demencia incurable”. Desde hace un tiempo se percibían rumores de que el ex jefe militar de 86 años daría este paso, al tiempo que un grupo de senadores de la alianza gobernante resolvía aplazar la presentación de una petición al Tribunal Constitucional para que declarase la inhabilitación del ex dictador en el cargo por demencia. Su eventual retorno como senador, puesto al que había asumido de por vida en marzo de 1998, pasó a ser historia ayer cuando Pinochet entregó su carta de renuncia al arzobispo Errázuriz para que la lleve al presidente del Senado, Andrés Zaldívar. Este informó que al dimitir Pinochet adquirió un nuevo fuero “como ex presidente de la República”, que entrará en vigor oficial el próximo martes en sesión ordinaria del Senado. El arzobispo relató que en el momento que fue a visitarlo, Pinochet “estaba en su casa, con su señora e hijos... me pidió que trajera al Senado la renuncia de él. Fue a su escritorio, la firmó y con mucha emoción me la entregó pidiéndome que la trajera”. Errázuriz agregó que Pinochet le dijo que la renuncia obedecía a su deteriorado estado de salud y que la determinación “le hacía bien”, y que habían sido cuatro años de dolor –en 1998 fue detenido en Londres y comenzaron las querellas en su contra.
En tanto, el hijo menor del ex dictador, Marco Antonio Pinochet, manifestó que la decisión había sido evaluada junto con los abogados y la familia. Además, subrayó que se hizo “por el bien de Chile, para dar paso a la reconciliación y por su estado médico que no le permite votar en el Senado”. En este sentido el presidente Lagos dijo que los chilenos tendrán mayor tranquilidad. El presidente del Partido Socialista, Camilo Escalona, se refirió a que la decisión ayuda al servicio de la política, ya que era “impresentable” que quien cerró el Parlamento en 1973 se mantuviera como senador vitalicio.
También ayer, 4 de julio, una de las sedes de la cadena norteamericana de cintas de video Blockbuster en Santiago sufrió de un incendio provocado por grupos antinorteamericanos; se hallaron a cuadras del lugar unos panfletos con la consigna de luchar contra la intervención de Estados Unidos en Latinoamérica “contra el Plan Colombia y el poder norteamericano”.