La policía británica detuvo ayer a cuatro presuntos cómplices de los atentados del 7 de julio de 2005 en Londres. Entre los detenidos está la viuda del líder de los atacantes suicidas, Mohammed Siddique Khan. Hasina Patel fue arrestada en West Yorkshire, donde vivían tres de los cuatro terroristas que hace dos años se inmolaron en varias líneas del subte y en un colectivo, dejando 52 muertos y más de 700 heridos.

Todavía no se conoció el nombre de los otros tres hombres detenidos. Lo que sí se sabe es que dos de ellos fueron arrestados en la misma localidad que Patel y que tienen 34 y 30 años. El tercer hombre tiene 22 años y fue capturado en un albergue estudiantil. Todos fueron llevados a una estación de policía de alta seguridad en la capital británica para ser interrogados por el comando antiterrorista de la policía. El megaoperativo fue un trabajo conjunto de Scotland Yard y el servicio secreto MI5.

Un vocero de la policía dejó abierta la puerta a nuevas detenciones. “Estamos determinados a seguir la evidencia adonde sea que nos lleve hasta identificar a cualquier otra persona que haya podido estar involucrada en los ataques terroristas del 7-J”, aseguró el oficial, según la cadena británica BBC. Sin embargo, el abogado de Patel, Sureh Grover, se mostró sorprendido ayer por los arrestos. “Hasina y su familia han cooperado con la policía, los servicios de inteligencia, con el forense, han estado en contacto regular con todo el mundo”, explicó. “No hay absolutamente ninguna razón para estos dramáticos arrestos”, añadió.

Los de ayer no fueron los primeros detenidos por el atentado que sacudió a los ingleses y al mundo dos años atrás. En marzo pasado, tres presuntos terroristas fueron arrestados en Londres y, más tarde, fueron encausados por colaborar con los ataques en el metro londinense y en un autobús. A estos tres procesados y a las cuatro personas que detuvieron ayer se los acusa de haber apoyado a los cuatro autores materiales.

Los medios británicos especulaban ayer con que los actuales arrestos podrían ser consecuencia de los interrogatorios realizados a partir de las detenciones de marzo.