Miércoles, 13 de junio de 2007 | Hoy
EL MUNDO › A ROYAL SU PARTIDO NO LA DEJO UNIRSE CON EL CENTRO
Dos días después de la derrota electoral en las legislativas, el Partido Socialista (PS) francés sigue hundiéndose en peleas intestinas. La dirección nacional de la fuerza volvió a desmarcarse ayer de su ex candidata presidencial Ségolène Royal al rechazar su propuesta para aliarse con el partido del centrista François Bayrou (Movimiento Demócrata –MoDem–). Este fue el segundo revés que tuvo que sufrir Royal ayer, luego de que el propio Bayrou descartara unir fuerzas en las circunscripciones en las que habrá una segunda vuelta el próximo domingo.
Desde la cúpula socialista intentaron bajarle el tono a la nueva pelea partidaria. “No hay ningún desacuerdo con Royal. Cada uno tiene su método, pero el mensaje es el mismo: evitar que la derecha sea no sólo fuerza dominante sino que nos aplaste”, aseguró el presidente del partido y el esposo de la ex candidata, François Hollande. A pesar de la negativa de su partido, Royal se defendió sin dar más explicaciones. “Tengo un contacto cercano con Bayrou y me parece muy normal dejarle un mensaje”, señaló la dirigente, que aunque no obtuvo un apoyo formal de Bayrou para la segunda vuelta presidencial, sí logró un acercamiento claro en los medios de comunicación. No obstante, Bayrou optó ayer por reforzar la identidad de su partido, recién nacido. “Quiero evitar toda ambigüedad”, aseguró el ex candidato presidencial, quien además aseguró que no quiere que lo acusen de haberse pasado a la izquierda.
Sin duda, la apuesta le salió mal a Royal, quien intenta contener los resultados fatales que pronostican las encuestas para la segunda vuelta legislativa. El sistema electoral mayoritario francés no le garantiza a MoDem más de cuatro mandatos en el ballottage del domingo. Sin embargo,en decenas de circunscripciones el partido de Bayrou podría convertirse en la fuerza clave para empujar la balanza para un lado o para el otro. Por su parte, tras el enorme éxito conseguido en la primera vuelta, la Unión por un Movimiento Popular (UMP) del presidente Nicolas Sarkozy y sus aliados podrían contar en la segunda vuelta con al menos una mayoría de dos tercios en la Asamblea Nacional, e incluso no se descarta que se hagan con una mayoría de tres cuartos.
Pero esto parece preocupar menos a la cúpula del PS que un eventual liderazgo indiscutido de Royal. “Las estrategias electorales se debaten en las instancias nacionales del PS y sólo estas instancias son legítimas”, afirmó en la reunión del Buró, el ex primer ministro Pierre Mauroy, quien fuera uno de los principales apoyos de la ex candidata durante la última campaña.
Muchos analistas franceses interpretaron la decisión del Buró como un espaldarazo a Hollande en detrimento del ascenso de su esposa. Después de la derrota presidencial de mayo pasado, los medios comenzaron a hablar del partido de las dos cabezas, en referencia a los dos liderazgos paralelos de la cúpula partidaria –con Hollande a la cabeza–, por un lado, y de la ex candidata, por otro. “Estoy harto de que la vida política, y concretamente la de mi propio partido, gire en torno de la vida de una pareja”, coincidió el diputado Manuel Valls.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.