EL MUNDO
Golpe al espionaje interno en una corte muy secreta
El Departamento de Justicia y el FBI recibieron un duro golpe de una corte muy reservada que determinó que el espionaje interno antiterrorista había ido demasiado lejos. El Departamento apeló el fallo, que la oposición consideró “un rayo de sol”.
Por Matthew Engel
Desde Washington
La corte más secreta en Estados Unidos, que considera pedidos para permitir vigilancias a los sospechosos de terrorismo y de espionaje, ha lanzado un ataque sin precedentes al gobierno. La poco conocida Corte de Vigilancia de Inteligencia Exterior dijo que el FBI había cometido más de 75 errores en sus solicitudes de órdenes de allanamientos y en consecuencia rechazaba un pedido del Departamento de Justicia para aflojar los controles sobre seguimientos e intercepción de líneas telefónicas. Agregó que las propuestas no “estaban razonablemente diseñadas” para salvaguardar la privacidad de los norteamericanos.
La corte existe desde 1978, pero en el Acta Patriótica de Estados Unidos, aprobada en respuesta a los ataques del 11 de septiembre, su autoridad ha aumentado. Su reputación siempre ha sido de pasividad y secreto. El más reciente informe periodístico sobre su trabajo dijo que sólo había rechazado una solicitud del Departamento de Justicia, sobre 12.000, de permisos para operaciones encubiertas. Sin embargo, ahora rechazó los nuevos procedimientos propuestos por el secretario de Justicia, John Ashcroft, que le darían a los fiscales en casos criminales un acceso de rutina a información recogida por el FBI. La corte afirmó que el plan les daría a los fiscales demasiado poder y crearía la posibilidad de uso erróneo.
El Departamento de Justicia está apelando la decisión y dijo que la corte estaba entorpeciendo los intentos del gobierno de monitorear a potenciales terroristas. “En nuestra opinión han interpretado incorrectamente el Acta Patriótica, y el efecto de esta incorrecta interpretación limita el tipo de coordinación que creemos que es muy importante”, dijo Barbara Comstock, vocera del Departamento. Mientras tanto, la corte y el departamento han acordado un texto temporario.
La disputa se ha estado sucediendo en privado desde mayo y llegó a la atención pública ayer, sólo por preguntas presentadas por el Comité Judicial del Senado, varios de cuyos miembros han estado preocupados sobre el uso del Departamento de Justicia de las leyes vigentes sobre escuchas telefónicas. Pero la corte aparentemente se quejó silenciosamente sobre el FBI anteriormente, y se cree que esto puede explicar por qué el bureau estaba reticente el verano pasado en buscar autoridad para hackear la computadora perteneciente a Zacarías Moussaoaoui, el supuesto “20º secuestrador” que fue arrestado antes del 11 de septiembre. El presidente del Comité Judicial, el demócrata Patrick Leahy, dijo que el enfoque de la corte era un “rayo de sol”.