El presidente Rafael Correa encabezó ayer la segunda jornada y la ceremonia oficial de apertura de la Asamblea Constituyente ecuatoriana, en la ciudad de Montecristi. Correa llamó a los legisladores a concretar “un cambio radical” en el país que consolide la “revolución ciudadana”.

El presidente de Colombia, Alvaro Uribe, fue el único mandatario que participó de la ceremonia de apertura de la Asamblea, que tuvo como eje un homenaje al prócer ecuatoriano y ex presidente Eloy Alfaro, cuyas cenizas fueron regresadas a su tierra natal. Los ministros de Exteriores de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Bolivia, David Choquehuanca, también participaron de la ceremonia protocolar en representación de los presidentes Hugo Chávez y Evo Morales, dos de los mandatarios más afines a Correa.

La Asamblea asumió ayer plenos poderes al disponer la disolución del Congreso nacional. El cuerpo va a deliberar por los próximos seis meses para elaborar la vigésima Constitución del país, esta vez a tono con “el socialismo del Siglo XXI” que propugna Correa.

Al colocar los restos del “viejo luchador” Alfaro en su tierra natal, Correa habló sobre la nueva democracia a la que debe guiar el organismo, al cual declaró estar sometido así como lo deben estar el resto de los poderes constituidos. “Debemos definir la clase de desarrollo que queremos tener”, manifestó el mandatario, que ya había sido ratificado el jueves por la Asamblea Constituyente en su cargo. Dijo además que los ecuatorianos deben buscar vivir bien y en armonía y no en la opulencia.

Criticó a los políticos tradicionales que “judicializaron la política”, se mostró opuesto a la autonomía del Banco Central y manifestó que es ineludible mantener la dolarización, pero que el dólar no debe constar como moneda nacional en la Constitución por haber sido impuesta ilegal e inconstitucionalmente.

“Por fin hay un proyecto verdaderamente nacional”, enfatizó y aclaró que “permitirá llevar adelante los cambios anhelados”, en una larga alocución ante alrededor de 500 invitados a la ceremonia especial. La Asamblea Constituyente tendrá a su cargo la redacción de una nueva Carta Magna para Ecuador, con la mayoría del oficialista Acuerdo País que, con 80 legisladores sobre 130, más los partidos afines, buscará una nueva institucionalidad del país, a tono con el “socialismo del Siglo XXI” que propugna Correa. No terminó su discurso sin criticar a la prensa, a la que acusó de ser “la guardiana del statu quo” en toda América latina y de cumplir ese papel históricamente.

El discurso de Correa se dio luego de la inauguración del museomausoleo donde fueron depositados los restos del líder de la revolución liberal de principios del siglo XX, en honor a quien se bautizó como “Ciudad Alfaro” a la sede de la Asamblea, a 500 kilómetros de Quito. Durante la ceremonia, que se realizó en quechua en varios momentos, se exhibieron grandes carteles con las imágenes de Simón Bolívar, Ernesto “Che” Guevara y Eloy Alfaro.

La Asamblea Constituyente, con mayoría absoluta del partido de gobierno Alianza País, comenzó sus sesiones este jueves eligiendo a su presidente, Alberto Acosta, y aprobó el primer “mandato constituyente”, que constó de diez puntos. Entre ésos estaba asumir plenos poderes nacionales, ratificar en el cargo al presidente Correa, que había puesto su oficina a disposición del cuerpo, y declarar el receso de los diputados.