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“Cuando los pueblos son libres tienen que saber darse su gobierno y si el gobierno que se dan se equivoca hay que quitarlo y poner otro”, dijo el coronel Pedro Soto en un claro llamado al levantamiento popular en una entrevista del programa “Hora 14” de la Cadena SER de España. El reportaje se realizó en momentos en que el militar se proponía acudir a la citación emitida por el general Régulo Anselmi Espin, jefe de la Fuerza Aérea, decisión que luego revirtió. Estos son sus conceptos.
–¿Cómo se encuentra?
–Me encuentro bien, íntegro, me encuentro completo. No tengo ningún problema.
–¿Podemos saber dónde está?
–Estoy en Caracas.
–¿En algún lugar refugiado?
–No, no estoy refugiado.
–¿Sabe el gobierno de su país dónde se encuentra usted?
–Lo va a saber dentro de poco tiempo porque voy a ir a hablar (...) de la aviación porque vamos a tener una conversación.
–¿Qué fue lo que lo impulsó a ir a pedir la dimisión del presidente Chávez y exigir la convocatoria de elecciones libres en su país?
–El clima tiránico en el que él ha tratado de poner a nuestro país. Él ha intentado establecer una ideología en nuestro país con la que no estamos de acuerdo ni las Fuerzas Armadas, ni la población civil organizada en mi país.
–Usted dice que tiene de su lado hasta el 70 por ciento de los militares de su país, ¿existe la posibilidad de que se produzca un golpe de Estado?
–No, nosotros los venezolanos no queremos golpe de Estado. Los militares venezolanos somos unos oficiales con un pensamiento democrático. Solamente pedimos al presidente que renuncie, que convoque a unas elecciones para que se reinstaure un sistema democrático con libre participación de todos los integrantes de este país.
–¿Qué puede pasar si el presidente Chávez se niega a dimitir?
–El pueblo dará respuesta a tu pregunta.
–¿Ha mantenido usted alguna conversación con algún representante del gobierno en las ultimas horas?
–Sí, hace aproximadamente unas dos horas me entrevisté con un general que me mandó el comandante general y el ministro de Defensa y llegué a un acuerdo con él de entrevistarme hoy con el comandante general de mi fuerza, el general Régulo Anselmi Espin.
–¿Qué puede pasar a partir de hoy?
–Ah, no lo sé. El fiará su posición, yo sólo pido que si yo cometí una falta en mi país por haber dicho la verdad, por haberme expresado en libertad, que se apliquen los reglamentos que existen ante los cuales no tengo ninguna objeción.
–¿Tiene usted miedo de la posibilidad de ser detenido, de ser arrestado?
–No, no tengo ningún miedo, absolutamente.
–¿Son muy importantes los apoyos del ejército con los que usted cuenta?
–Sí, son muy importantes.
–¿El presidente Chávez ha perdido por tanto buena parte del apoyo de los militares venezolanos?
–No tanto el apoyo de las Fuerzas Armadas, ha perdido al pueblo de Venezuela, a quien ha engañado y quien cifró esperanzas que no cumplió.
–Debo preguntarle de nuevo, coronel Soto, por algo que antes en la anterior vez que se lo pregunté de alguna forma quedó en el aire. ¿Existe la posibilidad de que si no hay en las próximas horas algún tipo de compromiso de acuerdo con el presidente Chávez se produzca algún tipo de movimiento cívico-militar, no sé cómo podríamos llamarlo, que acabe por provocar un cambio en la cúpula de su país en la presidencia venezolana?
–Sí, hay posibilidades. El día 23 de enero se reunieron para pedir la renuncia del presidente en un sector de Caracas 250.000 personas. Ya el 10 de diciembre había sucedido un paro general donde no se movió un alma en el país durante dos horas.
–¿Quiere decirse que usted considera que dentro de quizá poco tiempo podría pasar algo importante, algo grave, en Venezuela?
–Yo no diría que grave, diría más bien que importante porque cuando los pueblos son libres tienen que saber darse su gobierno y si el gobierno que se dan se equivoca hay que quitarlo y poner otro.
–¿Tiene usted algún tipo de contacto con el gobierno norteamericano? Porque sabemos que últimamente desde Washington se ha criticado bastante la política del presidente Chávez e incluso se le ha reprochado la falta de energía a la hora de combatir el terrorismo. ¿Tiene usted algún contacto, algún apoyo de Washington?
–No, no tengo ningún apoyo de Washington, no es el apoyo que yo quiero tener. Yo en el momento que me paré y pude ir a hablar lo hice interpretando el sentimiento de mis Fuerzas Armadas y de la población civil de Venezuela.